El Ayuntamiento de Mataró (Maresme) ha renunciado a la subvención de 2,7 millones correspondiente al proyecto de rehabilitación y dinamización turística del yacimiento de Torre Llauder que le había otorgado el Ministerio de Industria y Turismo en el marco de Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia, con fondos europeos Next Generation. El motivo de la renuncia es la imposibilidad de cumplir con los plazos fijados por la subvención.
Cuando el Ayuntamiento se presentó a la convocatoria se calculó que harían falta 27 meses para redactar el proyecto, ejecutar y justificar las actuaciones previstas. El problema ha sido que cuando se ha comunicado el otorgamiento de la subvención habían pasado ya 12 meses desde la solicitud y no quedaba tiempo material para cumplir con el calendario. Ante la imposibilidad de conseguir una prórroga, se ha tenido que renunciar a las ayudas.
ERC pide que intervenga la FCM
Mataró había solicitado los fondos para dinamizar, ampliar y rehabilitar la zona del Clos Arqueológico de Torre Llauder, pero el Ministerio de Industria y Turismo se encontró con un número de solicitudes de proyectos que sobrepasaba sus previsiones y esto hizo retrasar su valoración y selección. Dado que Torre Llauder es un BCIN (Bien cultural de Interés Nacional), el proyecto debía someterse a una serie de legalidades que era imposible cumplir con los plazos que se fijaron.
El grupo municipal de ERC detalla que Mataró, junto con otros municipios catalanes afectados, ha presentado dos alegaciones para solicitar ampliación de los plazos, pero les han sido denegadas. Los republicanos denuncian la mala gestión por parte del Gobierno del Estado, que ha supuesto la pérdida de estos recursos para sacar adelante la adecuación del espacio arqueológico. Por ello piden que el Ayuntamiento vía Federació Catalana de Municipis, de la que el alcalde David Bote es el presidente, emprenda acciones políticas con el Gobierno del Estado por las consecuencias ocasionadas por este hecho