La detención de un ocupa de origen subsahariano que el miércoles por la tarde acababa de asaltar un piso en un edificio del número 64 de la calle València, en el barrio de Cerdanyola, ha desatado una violenta oleada de incendios y actos vandálicos.
Los hechos tuvieron lugar cuando uno de los dos individuos que habían ocupado un piso en los bajos del edificio saltó a la calle desde el balcón intentando huir de la policía que lo acorralaba. En plena calle, se resistió violentamente a la detención, jaleado por un numeroso grupo de personas que se congregaron lanzando consignas contra la acción de la policía, que incluso se vio obligada a cargar contra algunos grupos que se agolpaban alrededor de los vehículos.
Poco después, entrada la noche, el barrio empezó a vivir episodios violentos violentos que ayer provocaron la quema de varios contenedores y un vehículo estacionado. Según los bomberos, entre las 1:32 h. Que recibieron el primer aviso de un toro mecánico ardiendo y un contenedor industrial en llamas; posteriormente, a las 1:41 se vieron obligados a sofocar un contenedor quemando en la Av. Gatassa y tres minutos más tarde otro en el Passeig Ramon Berenguer.
Desde que se produjo la desocupación, los vecinos del bloque aseguran que viven atemorizados porqué han recibido amenazas de muerte de los ocupas y de su entorno, que les han advertido que prenderán fuego a sus viviendas, una tensión que empezó hace una semana cuando gracias a la actuación vecinal pudieron abortar el primer intento de ocupación, dando aviso inmediato a la policía. La alarma instalada después del primer intento saltó el pasado martes, pero la puerta blindada y la movilización de los Mossos también impidió.
El miércoles sin embargo dos personas lograron entrar rompiendo el cristal de una ventana en el barrio de Cerdanyola, siendo detenido uno de ellos. Desde entonces no han cesado los incidentes en el barrio. Poco después de las 08:00 se vivieron las primeras escenas violentas por lo que ha sido preciso el refuerzo de unidades que los Mossos han desplazado al barrio.
Fuentes policiales atribuyen los incidentes a un grupo de jóvenes delincuentes, que actúan encapuchados, que acumulan varios antecedentes y que se han sumado al vandalismo propiciado por el entorno de los ocupas. Por el momento, ayer los agentes se vieron impotentes para frenar el alud de incendios de contenedores y de dos vehículos y una furgoneta que también fueron pasto de las llamas. Las mismas fuentes detallan que la violencia también es una reacción a los recientes operativos policiales contra el tráfico de droga en la zona.
Desde la madrugada del viernes, los Mossos han reforzado su presencia en el barrio con el patrullaje motorizado conjunto de las unidades Guilla, con agentes de paisano y con unidades especiales de actuación inmediata.
El alcalde de Mataró, David Bote, reaccionó dando apoyo a la acción policial y recordando que “tendremos tolerancia cero con las ocupaciones”, además, felicitó a los Mossos y advirtió que se mantendrán las mesuras de protección necesarias.
Por otro lado, desde la oposición, el portavoz del PP, Cristian Escribano, ha anunciado que elevará la situación que vive el barrio de Cerdanyola al Parlament de Catalunya. El también diputado popular aseguró que elevará el caso a la cámara catalana. Por su parte, desde Vox también han advertido que la situación “se le escapa de las manos al gobierno socialista”.

