El Ayuntamiento de Sant Iscle de Vallalta (Maresme), desde este julio, ya está realizando una gestión pública de su servicio de abastecimiento de agua. Desde 2001, la gestión del servicio estaba en manos de Agbar, y después de 24 años, el Ayuntamiento la gestionará de forma directa.
El municipio, de 1.463 habitantes, ha pasado a ser el último municipio de Catalunya en remunicipalizar el servicio de abastecimiento y pasar a gestionarlo a través del propio ayuntamiento, según la Associació de Municipis per l'Aigüa Potable (AMAP) la forma más habitual de gestión entre los municipios de menos de 5.000 habitantes. En este proceso, Sant Iscle de Vallalta ha contado con el apoyo de la entidad, de la que es miembro desde 2020.
De hecho, Sant Iscle de Vallalta es el tercer municipio de la comarca del Maresme al pasarse a una gestión directa después de haber tenido el servicio concesionado, antes lo habían hecho Arenys de Munt, en 2011, y Vilassar de Dalt, en 2023. Sin embargo, en el Maresme sólo seis municipios hacen una gestión pública, el 7%. En Catalunya esta proporción es del 22%. Actualmente tres municipios más están trabajando en recuperar la gestión directa del servicio.
El paso a gestión pública, según AMAP permite reducir las fugas, averías y pérdidas, incrementando notablemente las inversiones de renovación de la red, y mejorando su rendimiento. Además, el ayuntamiento recupera el control de todas las decisiones estratégicas, de la política tarifaria y la priorización de las inversiones, así como una mayor transparencia; elementos, todos ellos sumamente relevantes en momentos de sequía.
Desde 2010, en Catalunya, 42 municipios han remunicipalizado su servicio de abastecimiento de agua, con lo que cerca de 579.000 personas, el 7% de la población catalana, han pasado a recibir el agua de operadores públicos. Y, en estos momentos, 24 municipios están trabajando para ello en los próximos años.