La Diputación de Tarragona enfila la recta final de la tramitación de la largamente reivindicada reforma de la T-2021 entre la Ràpita y Poble Nou del Delta, conocida como la 'carretera de la vergüenza'.
La diputada de Infraestructuras del territorio del ente, Iris Castell, ha anunciado este miércoles que la aprobación definitiva del proyecto se llevará al pleno del ente provincial previsto el próximo 1 de agosto, una vez recibidos hace dos semanas los nueve informes favorables de las administraciones implicadas.
Con el proyecto aprobado, se iniciará el procedimiento para expropiar los bienes afectados y pujar las obras. El objetivo es poder iniciarlas dentro de este año, de acuerdo con el compromiso público de la presidenta del ente, Noemí Llauradó.
Pesadilla de los vecinos de Poble Nou del Delta y de miles de usuario
La pesadilla de los vecinos de Poble Nou del Delta y de miles de usuarios que transitan por una carretera estrecha y peligrosa, causando numerosos accidentes -incluidos mortales- en los últimos años, podría acabar en los próximos años.
La Diputación de Tarragona, la administración que ha asumido la ejecución de las obras, ha anunciado desde el mismo núcleo del delta del Ebro que ya hay fecha para empezar a trabajar en la fase final del proyecto de reforma.
Según ha avanzado Castell, la aprobación definitiva del proyecto se elevará la próxima semana a la correspondiente comisión informativa del ente para incluirla en el orden del día del pleno del mes de agosto, previsto para el viernes día 1.
El trámite permitirá iniciar los procedimientos de expropiación de bienes afectados en un tramo de unos 10 kilómetros y licitar las obras para, finalmente.
El ente provincial presupuesta por este año 5 de los 13 millones de euros que prevé invertir en la actuación, que se alargará dos años. En estos momentos, se desconocen las restricciones y limitaciones del tráfico que implicarán las obras.
Todo esto será posible después de que, dos semanas atrás, entraran en el ente los últimos informes pendientes de administraciones que debían pronunciarse sobre la viabilidad del proyecto. Entre ellos, un sobre contaminación lumínica y acústica solicitado a última hora por el Departament de Territori, que se suma a la larga espera para obtener la autorización de ocupación de la zona de dominio público marítimo-terrestre.
Nueve informes
“Hemos necesitado varios meses para que las administraciones digan la suya y llevaran los informes pertinentes”, ha apuntado Castell. En total, han sido nueve informes. Esto ha hecho, según la diputada, que el proyecto aprobado inicialmente el pasado mes de octubre no pueda ser sometido a la aprobación definitiva hasta agosto.
La previsión inicial del ente, precisó, era poder disponer de esta documentación para aprobarlo en el pleno de mayo.
La diputada ha precisado que la reforma de la carretera entre la Ràpita y Poble Nou del Delta es “una obra singular y de magnitud muy grande”. Ha afianzado el compromiso del ente provincial con un proyecto de mejora de una vía de la que todavía no es la administración titular -una condición que asumirá una vez comience a ejecutar las obras-. También insistió en que trabajarán con la previsión de poder empezar la ejecución dentro de este 2025 y agradeció a las diferentes administraciones afectadas la implicación para entender el carácter “prioritario” del proyecto.
Unos agradecimientos que ha extendido también al movimiento social vecinal, la plataforma #carreteradelavergonya, que en los últimos años se ha movilizado para denunciar la elevada peligrosidad de la vía y reclamar el inicio de las obras. “Gracias por la presión que hacen: no nos hemos sentido atacados, aunque se nos ha interpelado. La presión ciudadano ha sido también importante para que el proyecto pueda ser aprobado este 1 de agosto”, ha declarado, a pie de carretera, la propia Castell.
Tramo de 10 kilómetros
Las obras de mejora de la carretera T-2021 incluyen los primeros 9,79 kilómetros de la vía, que se ensanchará a los seis metros de calzada, más los nuevos arcenes, y la construcción de dos rotondas en la intersección con la carretera TV-3408 y en el núcleo de Poble Nou.
En el resto del camino, desde el casco urbano hasta las Salinas, se realizarán las actuaciones para garantizar la seguridad vial y previstas en el Plan Zonal de refuerzo de firme, señalización vertical y horizontal. En este tramo de 3,6 kilómetros se garantizará un ancho mínimo de 5 metros.