Autónomos piden un pacto autonómico por el pequeño comercio de la Comunidad Valenciana
Sectores económicos
El sector ha perdido más de 4.300 afiliaciones desde 2020, según denuncia la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores valencianos
Desde la Dirección general de Comercio valoran la propuesta, pero recuerdan que la cuestión debe tratarse en el Observatorio de Comercio Valenciano
Escaparate de Olegario, comercio emblemático del centro de València
Aunque el comercio y la hostelería son los sectores más representativos del colectivo de autónomos valencianos, ambos muestra signos de “estancamiento o pérdida de actividad”. Es una de las conclusiones del informe de la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores de la Comunidad Valenciana (UATAE) que reclamó ayer un “pacto autonómico por el pequeño comercio, liderado por la Generalitat Valenciana”, para hacer frente a la alta rotación de los autónomos que afecta también, y sobre todo, a los comerciantes. Apuntan a la necesidad de reforzar las políticas complementarias basadas principalmente en formación en gestión, acceso a financiación y asesoramiento estratégico.
Preguntada la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo que dirige Marián Cano, desde Dirección general de Consumo valoran la propuesta pero recuerdan que esta debe tratarse en el marco del Observatorio de Comercio Valenciano, órgano colegiado, consultivo y asesor en materia de comercio, adscrito a la Conselleria y presidido por la consellera.
El Observatorio de Comercio Valenciano es un órgano colegiado, consultivo y asesor en materia de comercio
Según la UATAE, tanto el comercio como la hostelería valenciana tienen mayor tasa de abandono, y suelen depender de inversiones iniciales elevadas y de márgenes reducidos. Explican además que cerca del 50% de los nuevos autónomos y autónomas de la Comunidad Valenciana deja la actividad antes de los 18 meses, “lo que sugiere que muchos negocios se inician con la tarifa plana, pero no logran sostenerse cuando las bonificaciones desaparecen”, apunta la asociación.
Aunque la Comunidad Valenciana fue la región que más autónomos sumó en el primer cuatrimestre de 2025, y en conjunto el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social ganó 15.433 autónomos en los cuatro primeros meses del año, el comercio y el transporte continuaron “con su particular caída libre”, advierte la organización de autónomos ATA. Y esta misma situación es la que puso ayer de manifiesto la UATAE al radiografiar el perfil del autónomo valenciano que, advierten, recurre al autoempleo “por necesidad” y lo asume en una situación “precaria”.
Y aunque, en general, en la Comunidad Valenciana la proporción de personas autónomas en el sector servicios (290.439) es superior a la media nacional (se sitúa en el 77,3% del total del colectivo), en 2024 había 86.665 personas trabajadoras autónomas en el sector comercio, lo que supone un descenso de 618 empleados por cuenta propia con respecto a 2023; y una pérdida de 4.359 desde el año 2020.
Más de 4.000 autónomos se han dado de baja en la Comunidad Valenciana desde 2020, y se convierte en una de las regiones con mayor pérdida relativa de este tipo de profesionales
Otro indicador, el de la ratio de autónomos por habitante, también apunta a la caída de profesionales. Este indicador muestra que la Comunidad Valenciana presenta un ratio de 110,7 personas autónomas por cada 1.000 habitantes en edad de trabajar, por encima de la media nacional (107,9). Sin embargo, advierten que el dato esconde una tendencia negativa, pues el territorio valenciano ha experimentado un aumento de 2,6 puntos respecto al año anterior, situándose entre las regiones con mayor pérdida relativa de autónomos.
Otra de las cuestiones que lastran al comerciante son los precios. Y es que según UATAE, en 2024, la actividad autónoma costó de media 7.500 euros más que en 2022. “Los alquileres comerciales se disparan, y la mayoría financia su negocio con ahorros personales o familiares, sin acceso real a financiación pública o bancaria”, sostiene la entidad, que habla de una nueva figura, la del “autónomo vulnerable”.