José Luis Ábalos ha presentado una denuncia ante la Policía por las pintadas aparecidas el pasado sábado en la fachada de su vivienda en València, en lo que califica como “un acto vandálico” consecuencia del “acoso y señalamiento” por parte de los medios de comunicación. Así lo ha anunciado este lunes a través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), donde también ha compartido una imagen de los grafitis, que incluían el mensaje “Sánchez corrupto”.
Este incidente se produce en el contexto de la investigación de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que apunta a presuntas comisiones irregulares en adjudicaciones de obras públicas durante su etapa como ministro, en las que también estaría implicado su exasesor Koldo García. La vivienda de Ábalos fue registrada la semana pasada por agentes de la UCO en el marco de esta pesquisa.
En su mensaje, Ábalos ha expresado su malestar por la cobertura informativa en torno a su caso, asegurando que “la espera prolongada de cámaras de televisión frente a su domicilio durante seis días, las constantes solicitudes de entrevistas y la invasión de su privacidad” han puesto en riesgo su seguridad y la de su familia.
Ábalos ha expresado su malestar por la cobertura informativa en torno a su caso
“No espero mensajes de solidaridad de nadie”, ha afirmado, aunque ha manifestado su deseo de que “ojalá acabe cuanto antes este hostigamiento mediático y esta reiterada persecución”. Además, ha advertido: “De esta y de cualquier cosa más que pueda ocurrirle a los míos y a mí mismo, les hago directamente responsables”, en referencia a los medios.
El exministro ha denunciado que algunos medios han “violado la Ley de Protección de Datos” al difundir imágenes del interior de su casa y de la matrícula de su vehículo. Asimismo, ha asegurado que esta cobertura ha generado “una ingente cantidad de amenazas de muerte” en redes sociales contra su persona.
El exministro ha denunciado que algunos medios han “violado la Ley de Protección de Datos”
“Hay una violencia mediática directa sin importar cuál sea su color, llegando al punto de violar la privacidad”, ha reprochado, culpando a “periodistas fanáticos con teclados, cámaras y micrófonos” de alimentar un clima de hostilidad.
Hasta el momento, ningún partido político ni compañero del PSOE ha emitido un comunicado público sobre el suceso. Mientras, la investigación judicial sigue su curso, y Ábalos mantiene su defensa frente a las acusaciones de corrupción.

