Reforestaciones y muros naturales regeneran las áreas calcinadas en 2022 en Bejís y Vall d'Ebo
Medio Ambiente
La Generalitat Valenciana destina 7,7 millones de euros a la segunda fase de los trabajos para la restauración forestal de las zonas afectadas por los grandes incendios de la Comunitat Valenciana de hace tres años
El fuego amenazó el pueblo de Bejís en el verano de 2022
El conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, visitó este viernes los trabajos de regeneración forestal en el municipio de Torás, uno de los enclaves más afectados por el incendio de Bejís que hace tres veranos mantuvo en vilo al Alto Palancia y a toda la Comunidad Valenciana.
Fue el mismo “verano negro” en el que también ardió la Vall d'Ebo, calcinándose un total 31.589 hectáreas, el 95% de ellas concentradas en los incendios de ambas zonas. El fuego de Bejís fue el más devastador, con 18.540 hectáreas afectadas entre las provincias de Castellón, Valencia y Teruel, y también el más tardío en sofocarse, ya que permaneció activo desde el 15 de agosto hasta el 13 de septiembre de 2022.
Para la regeneración de estas zonas rurales, la Generalitat Valenciana ha destinado una inversión de 7,7 millones de euros en una segunda fase de los trabajos, con actuaciones previstas en Torás y otras zonas de Altura, Barracas, Bejís, El Toro, Jérica, Sacañet, Teresa, Viver, Alcublas y Andilla.
Entre las medidas destacan la gestión del arbolado quemado y la construcción de fajinas y albarradas para proteger el suelo y favorecer la regeneración natural, así como la promoción de la biodiversidad mediante el resalveo de especies autóctonas del género Quercus y nuevas reforestaciones que refuercen la resiliencia de los montes. También se actúa en la mejora de la red viaria forestal y en la creación de franjas de protección en los caminos para garantizar un acceso más rápido y eficaz a los equipos de gestión y extinción.
Medidas preventivas
Se están creando “franjas de protección” en los caminos para garantizar un acceso más rápido y eficaz a los equipos de extinción
El conseller ha incidido además en que la recuperación no se centra solo en la vegetación, ya que se trabaja también en la “instalación y acondicionamiento de charcas y puntos de agua que contribuyen a la conservación de la fauna y a la sostenibilidad de la biodiversidad valenciana”, ha detallado.
La primera fase de las actuaciones de emergencia, activadas de inmediato tras los incendios, permitieron el apeo de arbolado con riesgo de caída y su triturado en 110,6 hectáreas; la colocación de fajinas en 32 hectáreas y 1.769 metros en caminos; la mejora de 70 kilómetros de pistas forestales y la construcción de ocho muros de mampostería y escollera. Estas obras supusieron una inversión cercana a los 2 millones de euros. Martínez Mus ha concluido que este esfuerzo de regeneración “pone en valor la colaboración entre administraciones, técnicos, brigadas y el conjunto de la sociedad para devolver la vida a nuestros montes, reforzar la prevención y garantizar un futuro más seguro y sostenible para las generaciones venideras”.