El colorete es un producto todoterreno que es capaz de transformar el rostro en segundos. Gracias a este cosmético se puede conseguir el deseado efecto buena cara y hacer que se vea mucho más fresca y jugosa, un efecto que se potencia si se opta por uno de textura cremosa que también se puede usar en los labios.
Un buen colorete es muchas veces la clave de que el maquillaje quede mucho más favorecedor. Sin embargo, a veces puede que la persona que lo lleva no se vea favorecida porque ha optado por un color que no acaba de ajustarse a su tono de piel y que deja un resultado que es muy poco natural.
“La clave para elegir el colorete perfecto está en identificar tu tono y subtono de piel”, indica la maquilladora Pilar Lucas, que ha tratado este tema en una de sus últimas publicaciones de Instagram. La experta ha compartido el truco definitivo para saber qué colores son los más adecuados según el color de piel de cada persona y cuáles se deben evitar.
Existen tres tipos de subtonos: frío, cuando la piel tiende a ser más rosada, azulada o con matices lilas; cálido, cuando tiene toques amarillos, dorados o melocotón, y neutro, que es cuando hay un equilibrio entre el frío y el cálido y, por lo tanto, queda prácticamente todo bien.
Blush Filter Blurring Blushlighters Palette, en el tono Rose Berry, de Huda Beauty (41 euros)
Para pieles claras como la de la maquilladora, la recomendación es optar por los coloretes rosados suaves -subtono frío-, melocotones “suavecitos” o durazno -subtono cálido- y nude rosado -subtono neutro-.
Fenty Cheeks, en el tono Summertime wine, de Fenty Beauty (28 euros)
En el caso de las pieles medias, los tonos ya son un poco más intensos. Los rosas, malvas y bayas suaves para subtonos fríos, corales y melocotón para subtonos cálidos y, para los neutros, Lucas aconseja rosas y lilas.
Soft Pop Plumping Blush Veil, en el tono Perfect Pink, de Makeup by Mario (37 euros)
Los colores más vibrantes son los más apropiados para las pieles morenas, como el fucsia y el vino -subtono frío-, ciruelas y cobrizos -subtono neutro- y naranjas mucho más intensos o bronces -subtono cálido-. “¡Qué bien lo explicas!”, dice una de las seguidoras de la maquilladora.


