Nada arruina más un desayuno que el miedo injustificado. Durante años, el huevo fue acusado de elevar el colesterol, casi como si se tratara de un enemigo de la salud. Pero resulta que no solo es inofensivo, sino que aporta proteínas de alta calidad y colina, un nutriente esencial para el cerebro. Es solo uno de tantos mitos sobre la alimentación que han circulado sin fundamento.
Nutrición
El papel de las etiquetas en la percepción de los alimentos
Ivonne Hernández, nutricionista, desmonta estas falsas creencias con datos claros. Explica, por ejemplo, que los sellos de advertencia en los alimentos no significan que un producto sea dañino por sí solo: “Tenemos que recordar que estos sellos están calculados por una cantidad de cien gramos, pero no necesariamente reflejan la calidad del producto”. Es decir, un alimento puede parecer poco saludable según la etiqueta, pero en una porción razonable no tiene por qué serlo.
Y si se habla de etiquetas erróneas, las proteínas vegetales también han sido víctimas de desinformación. Se dice que son incompletas, lo que implicaría que no pueden satisfacer los requerimientos diarios. Sin embargo, Hernández aclara que combinarlas con cereales permite obtener todos los aminoácidos esenciales, convirtiéndolas en una opción viable para cualquier dieta equilibrada.
Pero no todo se trata de qué comer, sino también de cómo mejorar la absorción de nutrientes. Uno de los ejemplos más claros es el hierro. Muchas personas sufren de anemia sin saber que algunas deficiencias nutricionales pueden ser la causa. Y aquí entra un aliado clave: la vitamina C. "Es la que ayuda a la absorción de hierro”, afirma la especialista, destacando la importancia de combinar alimentos ricos en ambos nutrientes para optimizar su aprovechamiento.
Es necesario
Importancia de la suplementación en dietas restrictivas
En cuanto a los suplementos, hay uno que es indispensable para quienes siguen una alimentación vegana estricta: la vitamina B12. Esta solo se encuentra de forma natural en productos de origen animal, por lo que su suplementación es fundamental para evitar deficiencias.
Por último, está la eterna confusión sobre las grasas. No todas son perjudiciales, y algunas incluso pueden ser beneficiosas. Las grasas monoinsaturadas, presentes en el aguacate, el aceite de oliva y las semillas, tienen efectos antiinflamatorios y favorecen la salud cardiovascular. A diferencia de lo que muchos creen, no todas las grasas deben evitarse.
Desmontar estos mitos no solo permite tomar mejores decisiones alimenticias, sino que ayuda a dejar atrás preocupaciones innecesarias. Porque al final, comer bien no debería ser un problema, sino una fuente de bienestar.