Pasamos muchas horas sentados, ya sea en la oficina, en el sofá o incluso en el transporte público. El sedentarismo se ha convertido en una parte habitual de nuestras vidas y se ha identificado como un riesgo importante para diversas enfermedades. Esta es una de las principales razones por las que incorporar actividad física en nuestra rutina diaria es crucial.
Como comenta Arao Baladrón en una entrevista para La Vanguardia: “La gente suele pensar que si caminan bastante, ya están haciendo ejercicio”. Sin embargo, el tiempo prolongado que pasamos sentados se considera sedentarismo y, sorprendentemente, se ha identificado como un factor de riesgo independiente para ciertos tipos de cáncer, incluso si se hace ejercicio regularmente.

Movimiento borroso de las personas que caminan en la ciudad
“Es impactante, porque te hace replantearte lo importante que es levantarse cada cierto tiempo. Solo necesitas unos minutos: hacer saltos, burpees o sentadillas puede marcar una gran diferencia en tu día”, explica Rhonda Patrick, doctora en Ciencias Biomédicas por la Universidad de Tennessee en Memphis.
Desde 2014, Patrick lidera FoundMyFitness, LLC, una plataforma que ha acercado la ciencia a un público global, compartiendo contenido basado en evidencia sobre salud, nutrición, longevidad y bienestar físico. Es una voz destacada en divulgación científica.

Mujeres adultas entrenando piernas haciendo cuclillas y saltando
Según Patrick, un estudio demostró que hacer 10 sentadillas con peso cada 45 minutos durante una jornada laboral de 8 horas es más efectivo para regular los niveles de azúcar en sangre que caminar 30 minutos seguidos. “Lo comprobé yo misma: me tomó solo 27 segundos hacer 10 sentadillas. Es una excelente forma de romper el tiempo sedentario”, añade.
Otros estudios, como los publicados en Informes Fisiológicos, revista revisada por expertos de la Physiological Society, revelan que hacer descansos con ejercicios de resistencia durante largos períodos de estar sentado mejora el flujo sanguíneo tras consumir glucosa.
Hacer solo 3 minutos de ejercicio ligero, como sentadillas o levantar las rodillas, cada 30 minutos ayuda a mejorar la circulación en las piernas después de comer, en comparación con estar sentado durante 3 horas seguidas. Estar mucho tiempo sentado afecta negativamente a los vasos sanguíneos, lo que está relacionado con enfermedades cardiovasculares y metabólicas. Por eso, estos estudios sugieren que moverse un poco cada cierto tiempo es una forma sencilla y efectiva de cuidar la salud.