Mario Alonso Puig, médico y experto en desarrollo personal: “Estamos siempre comparando dones. Tenemos una distorsión mental que nos impide reconocernos”
Psicología y bienestar
El popular divulgador habla sobre la incapacidad de evitar que nos estemos constantemente comparando con los demás
Mario Alonso Puig, médico y conferenciante.
“Todo el mundo nace con un don, pero no es tan evidente”. Así lo afirma Mario Alonso Puig, médico y experto en desarrollo personal en una de sus últimas entrevistas. El especialista habla sobre este tema con María Gabriela Penouco en su podcast, Reiníciate, donde insiste en que descubrir nuestro don es lo mejor que podemos hacer no solo para mejorar nuestra vida, sino también para conseguir ayudar a otros.
Según el experto, todos nacemos con un don. A él mismo le decían que tenía el don de la comunicación, pero no supo lo que significaba durante años. “No es por ponerme méritos. Mis enfermos me decían que lo que les contaba les cambiaba la vida, cuando yo pensaba que era lo normal”, cuenta el popular divulgador.
Mario Alonso Puig, médico y conferenciante.
Puig revela que, desde muy pequeño, contaba cuentos o leía libros, y la gente se callaba. “Era tremendamente natural. Siempre les llamaba exagerados. Quién diría que se convertiría en uno de los elementos esenciales en mi vida”, reflexiona. “Esta es la cosa, creemos que solo vale lo que se hace con esfuerzo y lo que no, lo desestimamos”.
Para el médico, ser conscientes de nuestros dones puede ser crucial para mejorar nuestra vida, pues puede ser la clave para desarrollar el verdadero potencial. “Tenemos que descubrir esas cosas que se nos dan bien de forma natural, aunque tú no las valores porque para ti son parte de tu forma de ser y orientar mucho de tu vida en relación a ese don”.
Mario Alonso Puig, médico y conferenciante.
El don es como un regalo del universo, hay que descubrirlo. Hay muchas personas que se van de esta vida sin descubrirlo
Según Puig, para poder descubrir este don, sólo hay que pararse a pensar qué les llama a otros la atención de nuestra persona. “Miramos con una lente muy distorsionada, y muchos de estos dones no encajan con esa lente”, explica. “Con lo cual, al ser ignorantes, ni los vemos, ni los trabajamos”.
Mario Alonso Puig, médico y conferenciante.
El médico lamenta además que siempre estemos, además, comparándonos unos con otros. “Yo siempre pongo un ejemplo: ¿Qué es mejor: una secuoya o un manzano? Unos dicen que una secuoya porque es más alta que un manzano, otros que un manzano porque da manzanas. Al final, el mundo de la comparación es muy peligroso. Cada uno es hermoso en lo que nace, pero estamos siempre comparando. El que nace manzano, en lugar de decir ‘qué maravilla las manzanas que produzco’, se centra en lo alta que es la secuoya de al lado”.
Para Puig, la lente que distorsiona nuestra mirada nos impide reconocer nuestros propios dones, apreciando los de los demás. “Nos impide mirarnos y conocer nuestros dones. En el momento que tengas otra mirada más apreciativa nos quedaremos fascinados con la cantidad de dones que tenemos”.