Miguel Assal, experto en primeros auxilios: “Aunque creas que no pasa nada por cortar la parte ‘mala’ de la fruta y comerte lo bueno, lo cierto es que puede ser muy peligroso”
Salud
Muchos creen que algunos de estos comunes hábitos son inofensivos cuando en realidad pueden tener consecuencias para nuestra salud mucho mayores de lo que pensamos
.Miguel Assal
En los últimos tiempos, vivimos avasallados de consejos en redes sociales sobre alimentación saludable, recetas y formas de aprovechar al máximo lo que tenemos en casa. Pero, ¿qué pasa cuando algo que hacemos normalmente, como cortar una parte ‘fea’ de una fruta o abrir una lata algo hinchada, puede convertirse en un riesgo para tu salud?
En un mundo en el que los precios no paran de subir y que nos obliga a aprovechar al máximo cada alimento para evitar el desperdicio, a veces olvidamos que no todo lo que parece “rescatable” debería terminar en nuestro plato. Lo que para muchos puede parecer una simple costumbre positiva, en realidad puede tener consecuencias para nuestra salud mucho más serias de lo que imaginamos.
En uno de sus últimos vídeos en su cuenta de TikTok, el experto en primeros auxilios, Miguel Assal, ha lanzado una advertencia que se ha vuelto viral. Assal asegura que hay ciertos hábitos diarios en los que muchas veces ni reparamos y que repetimos por haberlos visto cientos de veces en nuestros seres más cercanos, que pueden representar un verdadero peligro, casi sin que nos demos cuenta.
Si una lata tiene la tapa hinchada, no la abras ni la pruebes
El primero de los hábitos que el experto nos recomienda no seguir haciendo es el de quitar la parte que se ha puesto mala de las frutas para comernos el resto y evitar así tirarlas. Aunque parezca que no tiene nada de malo, lo cierto es que puede ser muy perjudicial: “Esa parte que ves como ‘mala’ ya ha liberado toxinas por toda la pieza. Aunque cortes lo malo, lo peligroso ya está dentro y ni siquiera puedes verlo ni olerlo”, advierte.
Además, en cuanto a las latas o envases con la tapa ligeramente abultada, Miguel recomienda “no abrirlas ni probarlas”, pues podríamos estar ante un caso de botulismo, una intoxicación alimentaria potencialmente mortal que se da en alimentos mal enlatados o conservados en condiciones no seguras. Algunos de sus síntomas son dificultad para tragar, visión borrosa, debilidad muscular, parálisis e incluso la muerte si no se trata a tiempo.
Si una de las partes está podrida es importante desechar ese alimento completo
Por último, Miguel explica que, por más que parezcan inofensivas e incluso normales, no deben comerse las patatas con brotes o partes verdes. Según el experto, ese color verdoso indica la presencia de solanina, un compuesto tóxico que puede provocar síntomas gastrointestinales severos o neurológicos. Los más habituales suelen ser náuseas, vómitos, diarrea y dolor abdominal, pero en los casos más graves puede llegar a darse incluso la parálisis total.