¿Eres de esas personas que piensa que la fiebre es uno de los mayores enemigos del ser humano? No estás sola. Sin embargo, esta creencia tan popular entre la población no siempre es correcta. Así lo ha explicado el inmunólogo Alfredo Corell en una reciente entrevista en Tiene Sentido, el espacio que presenta y en el que analiza con diversos expertos el bienestar desde todas sus dimensiones: físico, mental, emocional, financiero y espiritual.
''Hay palabras hoy en día que están muy denostadas. Una es la fiebre y otra es la inflamación. Son dos procesos fisiológicos naturales y necesarios'', afirma. Según el experto, el sistema inmunitario combate una infección enviando señales al cerebro para que aumente la temperatura del cuerpo.
''Consigue que las células de nuestras defensas trabajen mejor, más ágiles y con eso se consigue que algunas bacterias se mueran. Un simple incremento de un par de grados de temperatura mata bacterias. Y encima potencia la actividad de tus células, con lo cual es algo fisiológico y bueno'', señala. Por ello, el especialista insiste en que no hay que pensar que la fiebre es mala.
De hecho, el inmunólogo afirma que la solución para reducir la fiebre no siempre es un fármaco. ''Tener, 36, 37 y medio o 38 por unas horas no pasa nada. Si tienes 39 o 40, entonces sí. Hay que dejar un poco de margen a la fiebre para que actúe'', advierte. ¿Qué pasa si eliminas la fiebre con medicamentos? Pues, según el especialista, estaríamos quitando una herramienta perfecta que el cuerpo utiliza para matar virus y bacterias. ''Si la cortas demasiado rápido, estás frenando tu recuperación'', añade.
Fiebre
Cabe destacar que, según el estudio científico Fever and the thermal regulation of immunity: the immune system feels the heat (2015), la fiebre no un simple síntoma, sino un mecanismo activo y evolutivo que mejora la capacidad del sistema inmunitario para combatir infecciones.
En la misma línea, la doctora Gabriela Pocoví recuerda que la respuesta natural del organismo ante una infección viral, como la fiebre, puede y debe ser acompañada con alternativas que no bloqueen el sistema inmunológico. ''Los analgésicos y antipiréticos como el paracetamol, no contribuyen a la resolución natural (solo participan en el alivio del dolor y a bajar la fiebre), no obstante, pueden ser necesarios en fiebres prolongadas o muy altas, especialmente si hay riesgos de convulsiones o embarazo. Pero usemos la información con prudencia y sentido común'', apunta.
Fiebre
De hecho, la experta recomienda seguir estas indicaciones para aliviar el malestar de los procesos febriles o dolorosos:
- Mantenerse bien hidratados.
- Darse baños tibios, ya sean solo de pies o de cuerpo completo. ''Ayudan a mejorar la hidratación celular, promover la desintoxicación natural, relajar el sistema nervioso, aumentar el aporte de magnesio y bajar ligeramente la fiebre'', recalca.
- Realizar un masaje con aceites esenciales en los puntos de dolor. ''Pueden apoyar el proceso inflamatorio y la bajada de la fiebre'', afirma.
- Usar compresas y paños tibios en la frente, la nuca y en las axilas.

