Teresa Montoya, nutricionista y endocrina, sobre la obsesión por comer sano: “Puede causar ansiedad, estrés y aislamiento social”
Bienestar
Hay que tener en cuenta que este tipo de trastorno no es como el resto, ya que no se esconde, sino que se muestra a los demás
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La comida sana se puede convertir en una obsesión
Aunque hagas las cosas por beneficio propio, cuando algo se vuelve una obsesión, se convierte en negativo para ti mismo. ¿Puede la obsesión por comer sano convertirse en una enfermedad? Este es el caso de la ortorexia, la obsesión por comer constantemente saludable.
Actualmente, y más con las redes sociales, se busca de forma habitual tener una alimentación cuidada y considerada sana. El problema no está en comer bien, sino en la obsesión que se produce en torno a este tipo de comida hasta llegar a sentir desprecio por los alimentos que llevan aditivos o por las personas que los consumen, limitando sus relaciones sociales.
¿Qué es la ortorexia?
Este término se usó por primera vez en 1997 para calificarlo como un trastorno alimentario a la obsesión patológica por comer comida considerada saludable por una persona. Sin embargo, por el momento, este tipo de trastorno sigue sin estar aceptado en el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales.
Esto se trata de un desorden que conlleva riesgos de desarrollar trastornos de conducta alimentaria (TCA) y de sufrir estrés y ansiedad. Además, puede asociarse a anemias, falta de micronutrientes y osteoporosis, entre otros efectos. Sobre todo afecta a personas jóvenes y a mujeres y, oficialmente, todavía no está aceptado este término por su peligrosa normalización en la sociedad.
Comida considerada saludable
Teresa Montoya, jefa del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Infanta Elena, explica en un artículo del hospital Quirón, que esto es un “trastorno psicológico complejo que puede derivar en determinadas consecuencias negativas para la salud física y mental y que requiere de intervención profesional especializada e integral”.
De lo sano a la obsesión
Una condición que la experta advierte cómo “puede resultar en una serie de consecuencias negativas para la salud física y mental. Desde el punto de vista psicológico, esta condición puede causar ansiedad extrema, estrés y aislamiento social”.
Hay que tener en cuenta que este tipo de trastorno no es como el resto, ya que no se esconde, sino que se muestra a los demás y pretende convencerles de que está lleno de beneficios.
Según el artículo, esto puede afectar aproximadamente entre el 1 y 3% de la población. Y que en 2012 aproximadamente el 6,8% de los estudiantes universitarios españoles tenían síntomas de ortorexia.
Sobre todo, y lo más importante, es saber que al tratarse de un trastorno psicológico, la ortorexia necesita de ayuda profesional especializada para intentar empezar a desarrollar una relación más sana y saludable con la comida.