El reciente 110 aniversario de la firma del tridente es una buena excusa para repasar diez de las creaciones más fascinantes de este renombrado fabricante transalpino, responsable de un buen puñado de mitos de la competición e íconos de la carretera.
El primer coche de carreras con el logotipo del tridente de Maserati data de 1926. El Tipo 26 contaba con un motor de ocho cilindros en línea, sobrealimentado por compresor, con una cilindrada de 1.493cc, carrocería de aluminio, 800 kg y una potencia 128 CV.
El primer coche de carreras con el logotipo del tridente de Maserati data de 1926

El T26 participó en la Targa Florio de 1926 con Alfieri Maserati al volante, quien ganó su categoría
Bajo las siglas A6 (Alfieri, 6 cilindros), Maserati creó una serie de exitosos coches de carreras y monoplazas. El A6 1500 Gran Turismo de 1947 fue el primer coche de calle de la marca, con carrocerías diseñadas por Pinin Farina, Zagato, Frua, Vignale o Allemano. El 250F consiguió doce victorias en Fórmula 1, cinco de ellas en 1957, y permitió que Fangio consiguiera su quinto campeonato del mundo de pilotos. Contaba con un motor de seis cilindros de 2,5 litros y casi 300 CV.
En 1957 Maserati presentó el 3500 GT, que fascinó a estrellas de cine y a la jet set del momento. Su bella y elegante silueta, sobre una carrocería de aluminio obra de Touring, escondía un motor de 6 cilindros en línea de 3.500cc y 220 CV. En 1963, Maserati fue pionera al crear un nuevo segmento que fusionaba su maestría en deportivos con la carrocería de un automóvil de lujo de cuatro puertas: el Quattroporte, el modelo de la marca que más tiempo ha estado en producción.

En 2002 la evolución del 3200 GT pasó a llamarse Maserati Coupé y con su nuevo motor 4.2 alcanzó los 400 CV
En 1966 llegó el Ghibli, uno de los coches más bellos jamás producidos por su línea alargada y afilada, diseñada por Giorgetto Giugiaro. Bajo el capó se encontraba un motor V8 de 4,7 litros con capaz de entregar 330 CV. Presentado en 1998, el 3200 GT fue clave en la historia de Maserati, modernizando y revitalizando la oferta de la firma. Estaba propulsado por un motor V8 Biturbo de 3,2 litros con 370 CV.
En la década de los 2000, Maserati recuperó su participación en competiciones de resistencia y para homologar el modelo de carreras, produjo una versión de calle del MC12. Montaba un V12 de 6,0 litros que entregaba 630 CV y lo catapultaba hasta los 330 km/h. El cupé de altas prestaciones GranTurismo de 2ª generación y el SUV compacto Grecale, ambos de 2022, son dos de los modelos actuales más relevantes de la gama Maserati.