“Mojo en tu sidra mi devota mano / persigno con el índice y el medio / mi faz y voy a bendecir tu predio / marinero, rural, fluvial, urbano / católico, guasón, astur e indiano”. (Poema de Celso Amieva)
Cuando el artista Agustín Ibarrola realizó una intervención artística sobre los bloques de hormigón que forman el puerto de Llanes, su mensaje se planteó como un triple homenaje a la memoria a través del artista, el arte y el territorio. Hoy, Los Cubos de la Memoria suponen un nexo entre pasado y futuro, una caricia al mar que ha sido testigo de tantas historias.
Para los amantes del gótico, la iglesia de Santa María del Conceyu o basílica de Llanes, suponen el sumun de la visita urbana
Porque la villa histórica de Llanes siempre ha mirado al Cantábrico. Lo confirman sus tres playas principales, el aroma a salitre que recorre su entramado medieval o la arquitectura indiana que habla de navegantes y antiguas hazañas allende los mares para regresar cargados de historias del Nuevo Mundo. Siempre, sin perder de vista su historia como principal faro.
Nos perdemos entre las calles de Llanes para disfrutar de algunos emblemas irresistibles de esta localidad de Asturias pero, especialmente, un oasis cultural que juega al escondite con el mar en todo momento.
Qué ver y hacer en Llanes

Iglesia de Santa María del Conceyu, en la localidad asturiana
Si bien el concejo de Llanes engloba diversos lugares donde perderse, en lo que respecta a la villa histórica encontrarás planes de sobra durante tu visita. Mientras, a lo lejos, la sidra cae en una fina cascada sobre el vaso, la brisa trae las historias de un antiguo pueblo famoso por su puerto y una élite que, bajo su posición privilegiada, alimentó las defensas de una villa destinada a protegerse de constantes invasiones. Este es el principal motivo por el que Llanes lucía amurallado, siendo hoy el paño norte de la muralla el último resquicio junto con el icónico torreón del siglo XIII.
Tan solo dos de los hitos que podemos descubrir en el casco histórico, el kilómetro cero de una ruta por Llanes que invita a leer la historia con los pies y levantar la mirada hacia la casa del oficial de la corte Juan Pariente, cuya fachada es la más antigua del pueblo; o el palacio del Duque de Estrada, de estilo barroco.
Para los amantes del gótico, la iglesia de Santa María del Conceyu o basílica de Llanes -cuya construcción se inició en el siglo XIII tomando ciertas influencias del románico-, supone el sumun de la visita urbana gracias a sus muros lamidos por las trepadoras, la capilla de la Magdalena y la plaza de Santa Ana, donde se ubica la capilla homónima.
Un corazón cultural que despliega también un patrimonio tangible, rico y delicioso: el orbayu es la madre de sus deliciosos quesos -con citas como el Certamen de quesos del Oriente de Asturias, en agosto-, platos de marisco como las andaricas o nécoras, centollos y bogavantes, o sus fabes guisadas con carne de caza.

Playa del Sablón, en Llanes
Delicias que también se engarzan con un folklore basado en las antiguas danzas que tienen lugar en las fiestas de la Magdalena, el 22 de julio; San Roque, el 16 de agosto, y la Guía, el 8 septiembre, las tres designadas festas de Interés Turístico.
Relatos de ritmos y color que nunca pierden el mar de vista, especialmente cuando hablamos de una villa definida por un Cantábrico que siempre busca penetrar en sus secretos. Aquí los recuerdos terminan siempre en canto de gaviotas tras visitar El Sablón, playa de postal ubicada en la propia villa e ideal para contemplar la muralla; Puertu Chicu, la más local; y Todó, un festín de rocas que nos envuelve en un entorno agreste y atemporal.
El 'orbayu' es la madre de sus deliciosos quesos, con citas como el Certamen de quesos del Oriente de Asturias, en agosto
Solo entonces, la ruta se desvía hacia el paseo de San Pedro, ideal para acceder al mirador homónimo y obtener unas maravillosas vistas de la villa.
A partir de aquí, puedes continuar hasta el faro de Llanes a partir de la calle San Antón y alcanzar la punta de San Antón -con su bello homenaje en forma de Monumento a la mujer del pescador- a través de una senda costera de un kilómetro de extensión que nos conduce al mejor balcón de Llanes. Desde este mirador, el entorno se expande mientras los azules del Cantábrico y los verdes del prau mantienen una conversación fragante.

Un banco en el paseo de San Pedro de Llanes, con vistas a los acantilados del mar Cantábrico
A la vuelta, siempre puedes dirigirte de nuevo hacia un puerto, donde darte un festín en la taberna marinera El Bálamu antes de volver a contemplar el horizonte desde los Cubos de la Memoria. Una obra que parece encapsular todas las intenciones de una villa que nunca dejó de ser un confidente del mar. Un tributo a la memoria del territorio.
Y además...
'Llanes de cine'
Llanes de cine es el proyecto cultural que pone en valor los numerosos escenarios del concejo que han servido como platós para el rodaje de diversas películas, series, videoclips y documentales. Un itinerario imperdible que, si bien no incluye todas las obras rodadas en esta zona, permite visitar hasta 25 lugares donde se rodaron 18 películas, tres series de televisión y un cortometraje. Entre los ejemplos más notorios encontramos El Orfanato, rodada en la mansión indiana de Villa Parres; o El Abuelo, en el acantilado de Puertas de Vidiago.