Adolescentes en modo crucero: ¿qué funciona?
Viajar con 'teens'
La naviera MSC Cruceros crea un universo para jóvenes de 12 a 17 años que da a los jóvenes un lugar propio que ocupar en las vacaciones familiares
La monitora Ilenia con uno de los jóvenes pasajeros del 'MSC World Europa' en plena partida de futbol digital
Parecen vivir en un enfado permanente y todo les da pereza. Excepto ensimismarse con sus teléfonos móviles y salir con los amigos. Pero, ¿qué pasa cuando los amigos salen de la ecuación? Es lo que sucede en vacaciones, cuando padres de adolescentes deciden salir de viaje y llevarse a sus malhumorados retoños con ellos. Sin amigos de por medio, las horas se alargan, los ojos ruedan y las conversaciones se reducen a un “vale” o, con suerte, a un “no sé”.
En ese punto, muchos padres se dan cuenta de que los destinos family friendly funcionan bien para niños pequeños… pero se quedan cortos para quienes ya no pisan el miniclub ni de casualidad. No existen hoy en día muchas propuestas turísticas pensadas para viajar con adolescentes. Y es un error pensar que no se necesitan. Son un público adorable, pero incómodo, que reclama sin condescendencia un cierto grado de independencia, conexión (of course) y un poco de diversión a su medida. Si ellos se lo pasan bien, el 50% del éxito del viaje ya está garantizado.
Una adolescente contemplando las vistas de Génova desde el 'MSC World Europa'
Las compañías navieras son algunas de las empresas turísticas que más decididamente han apostado por programas específicos para los teenagers. En alta mar, son muchas las horas que hay que cubrir y cada vez son más los pasajeros que tienen entre 12 y 17 años. Una de las compañías pioneras en la creación de programas específicos para adolescentes es MSC Cruceros, que desde el 2023 cuenta con un programa diseñado a escala internacional para esa franja de edad. “Cada vez hay más adolescentes a bordo y queríamos evolucionar con ellos”, explica Antony James, director de Operaciones de Entretenimiento Familiar de MSC.
Los programas de entretenimiento de realidad virtual son de los que tienen más aceptación entre los jóvenes
La compañía decidió ampliar horarios, reforzar espacios y ofrecer hasta ocho horas diarias de entretenimiento específico, desde deportes y competiciones de videojuegos hasta fiestas con DJ, pases de karaoke y experiencias de realidad virtual. “Nuestro enfoque consiste en conectar con los jóvenes antes, durante y después del crucero”, añade James, que recuerda que la estrategia también incluye series web, contenido en redes sociales y hasta un videoclip musical —Cabin 12006— protagonizado por creadores de contenido populares entre los más jóvenes.
Visitar la sala de recreativos de cualquier barco es una opción, pero siempre insuficiente
A bordo del MSC World Europa, uno de los barcos donde se pone en práctica este programa, lo que mueve a los adolescentes parece claro: “Además de las pantallas, lo que más les atrae son los deportes. Siempre que hay fútbol o baloncesto en el programa, se llena”, asegura Macarena, Youth Staff Manager del barco. Los torneos de FIFA y PlayStation funcionan como puerta de entrada, un primer espacio donde romper el hielo antes de lanzarse a actividades más dinámicas.
Pero, más allá del juego, muchos buscan algo tan simple como compañía. Ilenia, otra de las animadoras juveniles del barco, lo ve cada día: “Buscan un ambiente donde puedan ser ellos mismos. No solo jugar: también hablar. Muchos me cuentan cosas de su vida”. Lo que encuentran en ese espacio juvenil es, en sus palabras, “un lugar seguro” donde saben que hay alguien que los escucha y los llama por su nombre.
Ocho horas de entretenimiento al día que incluyen deporte, discoteca y conexión
Los adolescentes tienen sus propios espacios donde los adultos tienen vetado el paso: solo los monitores
El equilibrio entre libertad y estructura es delicado, pero fundamental. “Si no les das un plan a seguir, se dispersan”, explica Macarena. “Pero cuando tienen horarios —como el torneo de FIFA a las cinco— se organizan entre ellos, se citan y empiezan a socializar”. Y es ahí, en ese pequeño engranaje de encuentros espontáneos dentro de una estructura flexible, cuando sucede la magia. “Cuando el adolescente encuentra un grupo de amigos, lo tiene todo. Y muchas de esas amistades continúan después del viaje”, añade. La generación Z no es solo digital: necesita interacción real. Que les den espacio, pero también razones para ocuparlo.
El 'MSC World Europa' cuenta con un simulador de Fórmula 1 que frecuentan con deleite los jóvenes
Detrás de cada una de estas dinámicas hay un equi formado pero, sobre todo, joven. Muchos de los monitores fichados por MSC proceden de colegios, campamentos u hoteles, y todos reciben formación adicional a bordo. La apuesta tecnológica también es evidente: “Hemos invertido mucho en tecnología; queremos que los espacios teens tengan las últimas consolas, juegos y equipos de realidad virtual”, detalla el director de operaciones de entretenimiento familiar de MSC, quien vaticina que en el futuro el entretenimiento juvenil será “aún más digital”, con más realidad virtual, torneos de e-sports y actividades vinculadas a redes sociales, pero sin perder de vista la sostenibilidad, un tema que, asegura, interesa cada vez más a los adolescentes
Los barcos también cuentan, además, con múltiples distracciones para todas las edades, como juegos recreativos '
Los idiomas se dan por sentado. Y es que la convivencia entre nacionalidades a bordo es otro de los grandes retos a los que se enfrentan cada día. “Italianos, españoles y brasileños son quienes más rápido se abren -cuenta Ilenia- Estadounidenses y alemanes tardan un poco más, pero al final todos acaban conectando”. “El inglés suele ser el idioma común, aunque italianos y españoles casi siempre se entienden sin esfuerzo”, bromea.
Para Macarena, el rol del animador es clave para que esa mezcla cultural funcione: “Es quien unifica, observa y conecta. A veces solo necesitan a alguien que rompa el hielo”. Y la mezcla funciona, pese a que en ocasiones los adolescentes lleguen agrupados por idioma; la propuesta de actividades los acaba cruzando, retando y juntando.
Muchas veces padres e hijos se dan cita en los coches de choque del 'MSC Europa' para poner la guinda a una jornada
“Hacer amigos y sentirse parte de un grupo es lo que más valoran”, resume Ilenia. Y cuando eso ocurre, todo el viaje cambia. También para los padres, que descubren, casi incrédulos, que sus hijos no solo no están aburridos, sino que han encontrado su lugar. Como dice Macarena, con la seguridad de quien ha visto cientos de transformaciones en cubierta: “Cuando logras que participen y se diviertan… la satisfacción es enorme”.