A nuestro peludo le tenemos que enseñar algunas normas y órdenes básicas desde bien pequeño, sobre todo cuando se trata de comida. De lo contrario, si no establecemos límites, tendremos que aguantar que el perro pida insistentemente un trozo, ya sea llorando, dándonos con su pata e incluso subiéndose a nuestra pierna.
Ese es el caso de Lucas, un pequeño golden retriever que aprovechó la visita a casa de su abuela humana para pillar sabrosa comida, según se puede comprobar en una publicación que se ha hecho viral en Instagram.
En el vídeo, vemos como la mujer está dispuesta a darle algo de comida al peludo, que espera impaciente a saborear esa receta casera. Le pide la pata, pero no hace ni caso: directamente se sube a sus rodillas y mete el morro en el plato. Su dueño le advierte de que no hay más comida, pero la mujer le pide que espere.
Ella cree que no es suficiente y saca de una especie de horno más platos de comida. Y el peludo enloquece. Ni espera ni atiende a órdenes y aprovecha un descuido para robar el trozo de pollo, aunque intentan disuadirlo, según se puede apreciar en la publicación.
Reacciones
“Bocado de campeón”
El simpático robo de este golden retriever no ha pasado inadvertido entre los usuarios de esta red social, que mayoritariamente exculpan al peludo por su corta edad. “Bocado de campeón”, bromea su dueño en su publicación. “Ni pata ni patiña. Comer, comer y comer”, comenta una. “Quien tiene una abuela tiene un tesoro”, añade otra. Y la mayoría coinciden: “Es lo más bonito que he visto hoy”.
