En una cuadra de Oregón, un gato atigrado lleva días durmiendo junto a una cría de poni como si le correspondiera cuidarla. Nadie lo ha colocado allí. Nadie se lo ha pedido. Pero él se acomoda en la paja, la observa con atención y, de vez en cuando, le da un empujón suave con la pata.
El gato se llama Rocky y la potrilla, Strawberry Shortcake. Ambos viven en la misma granja, donde también está Cupcake, la madre del pequeño poni. La sorpresa fue ver cómo, desde el primer día, el gato empezó a acercarse a la cuadra y a instalarse junto a la cría como si le tocara participar en su crianza.
Según puede verse en un vídeo publicado el 11 de junio en TikTok, los tres pasan buena parte del tiempo juntos dentro del establo. Y la convivencia es realmente buena, ya que el felino parecer respetar el espacio y la mamá tolera su presencia continua bastante bien.
La imagen llamó la atención por una razón concreta: el tamaño del gato y el de la potrilla son prácticamente iguales. Esto hizo que al principio algunas personas confundieran a Strawberry con otro gato. Lo aclaró su cuidadora al mostrar la diferencia: “Esa que está más alejada de la cámara no es un segundo gato, es la potrilla”.
Rocky, pese a ser macho, muestra un comportamiento que algunas personas han relacionado con una práctica habitual en grupos de felinos, donde se cuidan mutuamente a las crías. En este caso, la afinidad parece haber nacido por proximidad y costumbre, pero el resultado ha sido una relación singular. Según se ve en los vídeos compartidos desde la cuenta de la granja, el gato no solo duerme junto a la potrilla, también juega con ella y la acompaña en sus primeras semanas de vida.
El día que se grabó la escena, la potrilla apenas tenía unas horas. Aun así, ya compartía espacio con el gato, que se recostaba a su lado sin provocar rechazo por parte de la yegua, que también lo cuida como uno más. El vídeo suma miles de visitas y comentarios que apuntan a la ternura del momento, pero lo que muestra es, sencillamente, una convivencia tranquila entre animales que han creado su propio vínculo.
