Tilly, la perrita con una columna única que desafió los pronósticos y lleva seis años repartiendo alegría: “Un perro no necesita ser perfecto para enseñarnos lo que significa vivir con plenitud”
Muy enérgica
Aunque algunos la describen con comparaciones curiosas, en la práctica disfruta de las mismas actividades que cualquier otro can, con un entusiasmo que refuerza la idea de que su condición no marca su día a día
Pierden a su perro en el bosque y lo descubren jugando con osos
La percepción de quienes la ven refleja la ternura que provoca un aspecto poco habitual
La sorpresa de muchos veterinarios al comprobar la evolución de un perro con una anatomía tan poco común se ha convertido en parte de su historia. La previsión inicial no era optimista, y aun así, con el paso de los años, el animal ha demostrado que las expectativas estaban lejos de lo que finalmente ocurrió.
Esa contradicción entre lo previsto y lo que realmente ha pasado es lo que más destaca de su vida hasta hoy, marcada por revisiones médicas que siempre terminan dejando a los especialistas sin palabras.
Sin limitaciones
Una cría distinta acabó encontrando un hogar donde pudo desarrollarse
Ese perro es Tilly, una mestiza de spaniel tibetano que nació con el síndrome de columna corta y que ha cumplido ya seis años en perfecto estado de salud. Su madre la adoptó siendo aún una cría, cuando era la última de la camada que quedaba sin hogar, y desde entonces se ha convertido en una compañera inseparable. Pese a su particular constitución, todos sus órganos se desarrollaron con normalidad en el reducido espacio corporal y eso le ha permitido crecer sin problemas graves.
Su día a día no difiere del de cualquier otro perro, algo que se aprecia en los vídeos que circulan en redes sociales y en los que se muestra activa y alegre, ya sea acompañando a su dueña a hacer recados o explorando el jardín.
En uno de esos clips, un internauta comentó: “Es tan preciosa”. Esa frase resume bien la reacción generalizada que provoca Tilly, un animal distinto que se gana la simpatía de todos a primera vista.
En otro comentario, un usuario apuntó que “los perros con aspecto diferente son entrañables y adorables”. Esa percepción se repite a menudo, no solo por la ternura que inspira su figura compacta, sino porque muchas personas encuentran fácil identificarse con la idea de ser distinto y, al mismo tiempo, igual de válido: “Un perro no necesita ser perfecto para enseñarnos lo que significa vivir con plenitud”.
Aunque se la ha llegado a describir como un “dibujo infantil de un perro hecho realidad”, lo cierto es que vive como cualquier otro can. Corre, juega y disfruta de su entorno sin que nada parezca frenar su energía, una vitalidad que se ha convertido en el mejor ejemplo de que las limitaciones no siempre son tales.