Cuando metemos a un animal en nuestra vida comienza a formase un vínculo. Esa relación se va fortaleciendo con el paso del tiempo hasta que prácticamente nos convertimos en uno. Es como tener a un hijo.
Por eso, no es de extrañar que en muchas ocasiones nuestro perro o gato se comporte de una manera similar a nosotros. Si estamos alegres el animal se unirá al jolgorio, mientras que si la tristeza nos arruina el día también lo hará con la especie en cuestión.
Por eso, cada vez más estudios pretenden demostrar la relación que hay entre los estados de ánimo de uno y otro. La antrozoóloga Paula Calvo es una experta en las relaciones entre humanos y perros, y ha comentado varios de ellos en su cuenta de Instagram.
Las miradas, el estado de ánimo o las relaciones sociales, algunas claves de la relación entre perros y personas
El primero de ellos habla sobre las miradas, ya que, como dice Calvo, “cuando nos miramos fijamente a los ojos con nuestro perro aumenta nuestro cortisol y las hormonas de oxitocina, la hormona de la felicidad”.
El siguiente tiene que ver sobre el estrés, ya que si nosotros estamos estresados y ansiosos nuestro perro reproducirá ese mismo comportamiento. Por último, convivir con un peludo mejora “la empatía y las relaciones sociales, tanto con el perro como con otros humanos”.
