Del Golden Retriever al Border Collie: estas son las mejores razas de perro para convivir con niños
Mascotas
La convivencia entre peludos y niños ofrece múltiples beneficios en el desarrollo emocional de los más pequeños
Raquel Pavo, veterinaria: "Perros y gatos también pueden sentir estrés y, si se estresan mucho, pueden enfermar del estómago o del corazón; cuidar sus emociones también es medicina"
Golden retriever y un bebé
Siempre se ha dicho que el perro es el mejor amigo del hombre, pero si hay algo todavía más especial es el vínculo entre perros y niños. La conexión entre estos animales y los más pequeños del hogar está basada en el instinto protector, la lealtad y el amor incondicional. Sin embargo, no todas las razas de perro responden igual a la presencia de niños en el ámbito familiar.
Razas como golden retriever, border collie o beagle son destacadas por su inteligencia, su paciencia y su lealtad, ingredientes esenciales en la convivencia con niños pequeños. A continuación, ahondamos en aquellas razas de perro que mejor se adaptan a los niños.
Niño con su perro
Elegir un perro para una familia con niños requiere tener en cuenta no solo la tolerancia y paciencia del perro, sino también su energía, sociabilidad y tamaño. Tras considerar estos factores, destacamos 5 razas por encima del resto, las cuales han demostrado ser más sociables y cariñosas que otras.
Golden Retriever
Se trata de una de las razas más populares en redes sociales, y no es para menos. Estos perros destacan por su simpatía, su sociabilidad y su dulzura, llegando a ser extremadamente pacientes y protectores. Según Picart Petcare, los golden retriever entablan un vínculo poderoso con su familia y no tienden a herir a ninguno de sus miembros, mucho menos a un niño o un bebé.
Beagle
Llenos de energía, los beagles son unos perros conocidos por su alegría y su curiosidad. Les encantan los niños y suelen llevarse bien con otros perros, pero su origen de sabueso hace que tengan un fuerte instinto de caza, por lo que es posible que se distraigan con facilidad. Recomendado para familias más dinámicas, los beagles son ideales para niños, ya que disfrutan bastante del juego y rara vez son agresivos.
Border Collie
Estos perros de naturaleza leal, afectuosa y protectora, pueden llegar a formar fuertes vínculos con sus familias. Esta raza es extremadamente fiel a su amo, por lo que son perros que viven pendientes a lo que pasa a su alrededor. Siempre están alerta, lo que lo hace un perro idóneo como guardián del hogar, especialmente si hay niños. Eso sí, los perros de raza border collie son extremadamente activos, por lo que no es la mejor opción para niños sedentarios, ya que se aburrirá.
Labrador Retriever
Este perro de gran tamaño es sociable y muy noble, convirtiéndose así en uno de los perros familiares por excelencia. El labrador retriever es extremadamente afectuoso, inteligente y tolerante con los niños. Sin embargo, tiende a sufrir si pasa mucho tiempo solo, por lo que es recomendable para aquellas familias con espacio que disfruten del aire libre.
Niña junto a golden retriever
Cavalier King Charles Spaniel
Finalmente, destacamos el cavalier como una raza ideal para los más pequeños. Son perros de temperamento tranquilo y sociable, ideal para familias con niños pequeños o personas mayores. Tal y como indica SantéVet, su inteligencia intuitiva combinada con su capacidad de crear relaciones intensas, permiten a estos perros adaptarse a cualquier situación.
Un perro, el mejor compañero que una familia puede tener
Tal y como asegura el estudio Pet Dogs and Children's Health: Opportunities for Chronic Disease Prevention, el 12% de los niños que vivían con un perro alcanzaban el umbral de ansiedad frente al 21% de los que no vivían con perros. De esta forma, tener un perro en casa aporta múltiples beneficios al desarrollo infantil. Los niños que crecen junto a un perro suelen desarrollar una mayor empatía y comprensión emocional, aprendiendo desde pequeños valores como la responsabilidad y el respeto hacia los animales.
Según la terapeuta infantil Jackie Tassiello: “Las mascotas ofrecen humor, conexión y apoyo emocional durante momentos difíciles… ayudando a los niños a desarrollar empatía, compasión y a establecer vínculos.” Además, el contacto físico y el juego con el perro ayudan a reducir el estrés y la ansiedad, ya que aumentan la liberación de endorfinas y disminuyen los niveles de cortisol. Un perro no es solo una mascota: es el mejor compañero de crecimiento que una familia puede tener.