Ni muy alta, ni muy baja: esta es la temperatura ideal a la que debes poner la calefacción del coche

Consejos de seguridad

La clave está en encontrar un término intermedio, de lo contrario se verá condicionada la seguridad vial

Así sabe tu coche que te estás durmiendo al volante o que estás muy cansado y tienes que parar

La clave está en encontrar un punto medio a la hora de poner la calefacción del coche

La clave está en encontrar un punto medio a la hora de poner la calefacción del coche

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Durante la temporada de invierno, aumentan los desplazamientos en coche. Así, mientras que algunas personas se van de vacaciones, otras se desplazan hasta segundas residencias o casas de amigos y familiares para disfrutar de ocasiones señaladas, como la Navidad o el Fin de Año. En este contexto, nos acompaña una constante inevitable: los cambios bruscos de temperatura y el frío que envuelve muchos de estos trayectos.

La calefacción del coche se convierte entonces en una gran aliada. Sin embargo, ¿cuál es la temperatura ideal a la que debe estar? Esta es una de las preguntas más recurrentes, ya que cada persona tiene una sensación térmica diferente y depende de muchos factores. Ahora bien, aunque parezca algo intrascendente, lo cierto es que su respuesta puede ayudarnos a garantizar la seguridad vial.

El sistema de calefacción del coche permite calefactar el habitáculo en pocos minutos

El sistema de calefacción del coche permite calefactar el habitáculo en pocos minutos

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Temperatura del coche y riesgos en carretera

La clave está en el término medio

“No hay que pasarse ni quedarse corto a la hora de poner la calefacción del coche”, afirma el Real Automóvil Club de España (RACE). Asimismo, aclara que, “si te excedes a la hora de poner la calefacción, puede aparecer la somnolencia y la fatiga”; una de las principales causas de accidentes de tráfico. De hecho, según la Dirección General de Tráfico (DGT), entre el 15 y el 30% de los siniestros en España se ven provocados, directa o indirectamente, por la somnolencia.

Además, si en el habitáculo hace demasiado, el conductor empezará a sudar. Más aún, si va tan abrigado como es propio en esta época del año. Esto creará deshidratación y pondrá en riesgo la seguridad en carretera. Tal y como indica RACE, “la falta de líquidos y glucosa en el organismo reduce la atención al volante en un 50%, aumenta en un 66% la agresividad y provoca un 33% más de salidas de la vía”.

Finalmente, hay que tener en cuenta también a las demás personas con las que compartimos el vehículo. Cada uno tiene sus preferencias y, en el caso de los niños o ancianos, una elevada temperatura puede contribuir a la aparición de mareos.

Los coches modernos suelen equipar un sistema climatizador

Es importante seleccionar la temperatura adecuada 

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¿Y si la temperatura es demasiado baja?

Menor capacidad de reacción

Ahora bien, esto no significa que la calefacción deba estar apagada. Como decíamos en un principio, la clave es encontrar un término medio. Según RACE este sería en torno a los 19 y los 22ºC. ¿Qué pasa entonces si está por debajo de lo recomendado? “Tus piernas, brazos y manos pueden llegar a entumecerse con el frío y, por lo tanto, no vas a tener el control adecuado de tus extremidades”.

Esta circunstancia desencadenará en reacciones más lentas, así como “con cierta torpeza ante algún imprevisto”. Por ese motivo, es aconsejable evitar esta situación en la medida de lo posible, atendiendo al entorno, lo abrigados que nos encontremos en ese momento y las necesidades reales que encontremos en el interior del coche.

Es aconsejable quitarse el abrigo al conducir para evitar

Es aconsejable quitarse el abrigo al conducir para evitar “el efecto submarino”

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¿Qué es el efecto submarino?


Si hace mucho frío en el exterior y estamos entumecidos, es normal que al entrar en el coche decidamos quedarnos con el abrigo puesto. Se trata de algo natural y hasta lógico, pero que podría mermar nuestra seguridad en carretera, dando lugar a lo conocido como “efecto submarino”.

En palabras de RACE, “se produce cuando el cinturón de seguridad no se coloca bien y el cuerpo se desliza sin ser retenido”. Asimismo, entre las causas que lo producen se encuentra el llevar ropa muy holgada, como abrigos, puesto que “si hay un hueco entre nuestro cuerpo y el cinturón, la sujeción no será la adecuada y el cinturón de seguridad no hará bien su función”.

Debemos ser conscientes de que la calefacción del coche no es automática y lo más probable es que tengamos que esperar un poco hasta que el frío vaya desapareciendo poco a poco. “No va a calentar hasta que el motor del vehículo alcance cierta temperatura”, recuerda el RACE.

Lo aconsejable es no encenderla nada más entrar en el coche, sino esperar unos minutos. Una vez que el motor haya arrancado y circulado un poco, podremos encenderla. Eso sí, si la ponemos con el motor frío a una potencia muy alta estaremos forzando la mecánica. Además, tendremos que recordar reducir su intensidad cuando ya haga calor, para evitar el exceso antes mencionado.

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