Borja Hernández, abogado: “Vender un coche sabiendo que está mal y no decir nada para sacar más beneficio, puede ser un delito de estafa; la gente que lo hace se da cuenta del peligro cuando ya es tarde”
El riesgo de mentir
Las consecuencias de vender un coche con vicios ocultos son muy graves
Un especialista en la venta de coches de segunda mano desvela cómo intentan estafarte cuando compras un vehículo usado

El abogado Borja Hernández nos recomienda informar de todos los fallos de un coche antes de proceder a su venta.
Vicios ocultos, las dos palabras malditas que ‘amenazan’ a cualquiera que vaya a vender un vehículo de segunda mano. Y para saber más sobre las consecuencias, lo mejor es consultar a un abogado experto en el tema. Borja Hernández es letrado especialista en el mundo del automóvil y desde su perfil de TikTok (donde cuenta con unos 24.000 seguidores) expone casos y problemas. En uno de sus últimos vídeos habla de cómo los vicios ocultos pueden acarrear graves consecuencias: “Es importante saber si el vendedor era o no conocedor para reclamar daños y perjuicios”, asegura el abogado.
Borja expone el siguiente caso: “Un profesional vende el coche a un particular y podemos demostrar que, en el momento de la venta, el coche tenía junta de culata. Si el compraventa no lo sabía, podemos reclamar por la vía de los vicios ocultos, por la vía de la falta de conformidad, por la vía del aliud pro alio… Por muchísimas vías diferentes”, razona el abogado. Pero la cosa se complica si el fallo se conocía y aún así se hizo la venta: “Si era conocedor y se ha hecho a mala fe, se puede ir por vía civil, además se le puede reclamar daños y perjuicios. Si vamos por el Real Decreto Consumidores y Usuarios, también se puede hacer. Y si es en el caso de Cataluña, también se le podrán reclamar esos daños y perjuicios”, avisa Borja Hernández en el vídeo.
La cosa no acaba aquí: “Las consecuencias serán la reparación del bien, la resolución del contrato, la reparación y acumulación en este caso de los daños y perjuicios, etcétera, entre otras muchas que podría haber”, nos asegura el abogado. Pero, sin duda, lo peor viene ahora: “Lo realmente preocupante es que, cuando alguien vende algo sabiendo que está averiado y no dice nada para venderlo más caro y así sacar más beneficio, podemos estar claramente ante la comisión de un delito de estafa”, advierte el abogado.
Sin duda, es para pensárselo dos veces: “La gente no ve el peligro y cuando se ha metido de lleno y ya no puede salir, entonces entiende lo que pasa. Así que, si sabemos que un coche tiene algo, lo tenemos que informar. Le bajamos un poco el precio y se acabó”, recomienda tajantemente Borja Hernández.
Además, no es algo que suceda solo a los profesionales: “Esto aplica también a las compraventas entre particulares. La gente piensa que, cuando es entre particulares, no hay problema. O si le ‘enchufó’ el coche a un compraventa sabiendo que está mal… También puede tener grandes consecuencias”, finaliza el abogado experto en automoción.

