En la era del streaming, las plataformas compiten con cada vez más fuerza por quedarse con las mejores series de ciencia ficción. Este género se ha convertido en el ejemplo por antonomasia de calidad fílmica, pero aunque Netflix está compitiendo duramente por lograr el trono, con series como El Eternauta o películas como Estado Eléctrico, Apple TV+ lidera sin alguna duda en este tipo de series.
Severance, Silo, See, Invasión o Fundación son solo algunos de los títulos de sci-fi que nos ha traído Apple TV+ en los últimos años. La plataforma de la manzana tiene claro cuál es su línea editorial y, de momento, parece ser una estrategia que le sale muy bien. Pero aún tiene hueco para seguir sorprendiéndonos, y ahora lo vuelve a intentar con Matabot.
Estrenada el 16 de mayo, Matabot nos pone en una situación del todo distópica. En un futuro más cercano de lo que nos gustaría imaginar, una Inteligencia Artificial prevista para la seguridad ciudadana (vamos, un soldado a lo Robocop) ha conseguido hackearse a sí misma. ¿Qué quiere decir esto? Pues que ya no está provista solo para hacer lo que le dicte su sistema... sino para ser un humano normal y corriente.
Esta serie plantea una pregunta tan interesante como cuál es la barrera entre humanos y robots en un momento en el que la IA está a punto de superarnos. Pero lo más interesante es que no se va por las ramas: la serie es una búsqueda filosófica por parte del protagonista, interepretado por Alexander Skarsgård, por entender su naturaleza “humana” y su papel en el mundo.
Mientras debe ocultar su libre albedrío y entender el enorme conjunto de emociones que ahora lo acaparan todo, Matabot busca su lugar y se plantea, al igual que los que le acompañan por el camino, si lo que está haciendo está bien para el futuro de la humanidad.

Matabot.
El futuro está aquí
No es solo ciencia ficción
Tal y como lo venden en Apple TV+, Matabot no busca ser una serie clásica sobre IA. Busca ir más allá; mostrando cómo la tecnología puede llegar a replicar incluso nuestras emociones más íntimas.
Lo que Matabot pone sobre la mesa no es solo ciencia ficción. Ya han habido casos de chatbots que se declaran como humanos, incluso antes de que se pusiera de moda ChatGPT. Y la cosa, por lo visto, parece ir a más. Son debates que surgen cada día en Silicon Valley y hasta en China. Y, como todo lo viral, llegará a nuestras vidas antes de que sepamos cómo nombrarlo.