Sol, cultura y periferia

Hace años que los festivales musicales y de todo tipo demostraron que el verano también es época de consumo cultural. A diferencia del tópico que sitúa a toda la población urbana pasando julio y agosto embadurnados en crema solar bajo la sombrilla, el éxito de citas como el Grec, Cap Roig, Porta Ferrada o el Alma abrió una nueva puerta cultural que en los últimos años se ha expandido más allá de Barcelona y los principales núcleos turísticos para llevar esta oferta a las localidades del cinturón urbano. Son prueba de ello las diferentes actividades reseñadas en la apertura de la sección de Cultura de hoy, y que de un tiempo a esta fecha llenan de propuestas ciudades como Sabadell, El Prat, l’Hospitalet de Llobregat o Mataró con estrenos teatrales, danza y festivales de música, algunos con la solera del Altaveu de Sant Boi, que celebrará su 36.ª edición. Iniciativas que van en la dirección correcta de expandir el músculo cultural de Barcelona, proceso obligado si la ciudad pretende competir con las grandes urbes en el plano internacional.