Huelga extemporánea

No puede decirse precisamente que la jornada de huelga en apoyo de Palestina convocada por diversos sindicatos tuviera ayer un se­guimiento masivo. La mayoría de ciudadanos que vieron condicionada su movilidad por culpa de las manifestaciones, cortes de calles y carreteras, afectaciones en el servicio ferroviario y otras incidencias de la jornada se preguntaban qué sentido tienen justo en este momento, con un incipiente proceso de paz en marcha, estas movilizaciones, que en algunos casos estuvieron amenizadas por la actuación de los violentos habituales. Cabe preguntarse por la oportunidad y la eficacia de estas iniciativas justo cuando, tras dos años de conflicto, se abre una puerta a la esperanza, por mínima que sea. Y también merece una reflexión el papel jugado por algunos sindicatos que no han sabido adaptarse a una realidad que ha cambiado en cuestión de días y por unos partidos políticos que, con el alto el fuego en Gaza, se resisten a quedarse huérfanos de uno de sus banderines de enganche.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...