El pasado viernes, el Barça de baloncesto firmaba una meritoria victoria en Belgrado ante el Partizan de Obradovic en la Euroliga. La jugada clave llegó en los últimos segundos, cuando Will Clyburn anotaba un triple inverosímil desde prácticamente el círculo central culminando una actuación estelar. El veterano jugador de Detroit (35) llegó este verano a Barcelona con la vitola de estrella y no ha tardado en demostrar el porqué, siempre a punto para sacar a su equipo de un atolladero.
Con la visita del Real Madrid mañana al Palau en la mente de todos, Clyburn ha demostrado que también es un líder fuera de la cancha. Para celebrar la victoria en Belgrado y su partidazo, incluida esa jugada de PlayStation, el alero de Michigan invitó ayer a toda la plantilla y al staff a comer pizzas, un alimento bastante común a la hora de recuperar fuerzas en el conjunto azulgrana. La plantilla se ejercitó en el Palau al mediodía, después hubo ronda de entrevistas pensando en el clásico y, finalmente, llegó el momento de las pizzas, que un miembro del staff se encargó de gestionar.