En un verano desconcertante, de calor infinito, fuegos arrasadores y ahora aviso de dana, Sant Cugat está llena de hojas que lo taponan todo (ojo si llueve torrencialmente) y cacas de pájaro (menos de perros, porque muchos se han ido de vacaciones) por todas partes. Antes éramos un modelo de limpieza, me digo transitando en este escenario insólito mientras busco la furgoneta itinerante donde ir a renovar el DNI. Siento impotencia.
M.ª Mercedes Arenas Ylla
Sant Cugat del Vallès
Mostrar comentarios