Desconfianza constante

A lo largo del día recibo entre tres o cuatro llamadas indeseadas (a las cuales nunca respondo) y algún mensaje de bancos con los que no tengo relación solicitándome claves. Cuando camino por la calle o voy en transporte público, estoy vigilante para que no me roben. Me asaltan constantemente personas haciendo encuestas para que me suscriba a cualquier asociación… Son tantas cosas que nos hacen estar en alerta continua que vivo en desconfianza permanente.

Josep Maria Anguera i Celma

Barcelona

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...