José Vicente González, el presidente de la gran patronal valenciana CIERVAL, tiene fama de hablar claro y de enfrentarse a quien sea cuando de defender a los empresarios de la Comunidad Valenciana se trata. Ha sido un claro abanderado en la exigencia del corredor mediterráneo, denuncia lo "injusto" del actual modelo de financiación autonómica y mantiene excelentes relaciones con los líderes de las patronales catalanas, con quienes ha establecido complicidades y establecido puentes para lograr objetivos comunes.
Fomento afirma que el corredor mediterráneo se ejecutará en el plazo previsto, y que Valencia y Barcelona estarán conectadas por AVE en el 2015. ¿Confía en ello?
Yo estuve con la ministra y con su equipo antes de Navidad e hicimos un examen muy a fondo de la situación. Creo que se están cumpliendo los plazos. En proyectos tan grandes como este si no se cumplen los plazos al principio es imposible que se llegue a la conclusión en la fecha prevista, y creo que se está haciendo bien. Es una noticia positiva. Pero eso no es el corredor, es una parte del corredor, que ya estaba así en el proyecto original. Pero no podemos renunciar al corredor en su totalidad porque es la solución total y necesaria. Por eso debemos estar vigilantes y reivindicativos de que eso no se retrase, y presionando para que se aborde el corredor con sus dos vías independientes, una para pasajeros y otra para mercancías. Hemos conseguido la unanimidad en la sociedad civil y debemos evitar, desde la sociedad civil, que el objetivo se relaje: a finales de enero nos reuniremos en una cumbre en CIERVAL con todos que firmamos la declaración de Valencia, con empresarios de Catalunya, Murcia, Valencia y las Islas Baleares.
Pero el Gobierno sigue insistiendo en el corredor central. ¿No teme que pueda alterar esa obsesión los plazos de ejecución del mediterráneo?
No hablaré del corredor central, porque no voy a entrar en ese debate. Sólo le digo que Europa ya ha dicho lo que tiene que decir y es que la prioridad es lo que es; no hace falta decir más.
La sociedad civil valenciana, junto a la catalana, ha demostrado pulso cuando de defender una infraestructura como esta se trata. ¿Se pueden hacer más cosas desde la sociedad civil?
Creo que esa colaboración e impulso de la sociedad civil no debería acabarse con el tema del corredor. Me parece que hay muchas cosas en las que debemos remar en la misma dirección, como la financiación autonómica, que es muy injusta.
El Govern Català ha reclamado un pacto fiscal para resolver la cuestión de la financiación autonómica. Por cierto, ¿comprende usted que Catalunya lo pida?
Claro que lo comprendo, aunque no se si lo hubiera pedido de la misma manera. Mire, llevamos 20 años con este asunto y el problema sigue sin resolverse. Me parece increíble. En España hay cuatro autonomías que son contribuyentes netas: Madrid, Barcelona, Valencia y Baleares. Pero hay una diferencia importante entre esas cuatro: tres tienen renta per cápita superior a la nacional, y Valencia la tiene menor, con el 88,4%. No puedo entender que pueda ser contribuyente neto, debería ser receptor, eso es lo que dice el sentido común, es una obviedad. Está previsto que en el 2014 se produzca la revisión y creo que hay que abordarlo con rigor. En Valencia debemos no pedir sino exigir esa financiación y además nos tenemos que embarcar todos en una labor pedagógica para hacerles ver la razonabilidad de nuestra exigencia, porque si no hay acuerdo entre todos será difícil cambiar el modelo.
¿Qué opina de que dos entidades catalanas, Banc de Sabadell y CaixaBank se hayan quedado con CAM y con el Banco de Valencia?
No es la solución que me hubiera gustado, pero no porque lo hayan comprado entidades catalanas o chinas, esa no es la cuestión. Estoy apenado que hayamos perdido esos medios, porque por muy bien que lo hagan no es lo mismo que no sean “tus bancos”. Pero eso ya se ha perdido, vale. A partir de ahí lo que tenemos que procurar es que los principales accionistas de esas entidades tengan la suficiente sensibilidad, y sentido común para imbricarse bien en Valencia, y ser unos bancos “amables” para Valencia; porque de lo contrario los valencianos obtendremos financiación por otras vías y será peor para ellos porque perderán cuota de mercado. Pero como creo que son inteligentes lo harán bien, a pesar de que no serán nunca entidades valencianas. Deseo que sean unos buenos compañeros de viaje del tejido empresarial valenicano. Con Bankia aparte, yo creo que SabadellCAM va en la buena dirección, y estoy convencido de que ocurrirá lo mismo con Banco de Valencia. Ahora hay un exceso de prudencia, pero yo no tengo ninguna queja.
¿Es posible levantar la Comunidad Valenciana con la política de recortes?
Yo creo que tenemos que avanzar volviendo en la Comunidad Valenciana a algo que teníamos antes de la fiebre de la burbuja inmobiliaria; se trata del reparto del peso específico que tenía cada sector en la economía. Era un reparto equilibrado, donde la industria tenía el 20% del PIB. Hemos de generar riqueza y empleo, y volver a fabricar cosas. Respecto a los recortes creo que pueden ser bueno para reducir el déficit siempre y cuando se combinen en fondos para hacer eso, generar dinamismo empresarial, porque si sólo hay recortes habrá menos ingresos. Le pongo el ejemplo de las exportaciones, que están creciendo significativamente; ahora exportamos más que importamos, y eso es muy positivo, e indica que ese es el camino, el de ser competitivos. Por eso le insisto en que los recortes sólo tienen sentido si activamos políticas que generen dinamismo empresarial, reindustrialización, investigación y empresas de un tamaño adecuado. Sólo así tendremos futuro.
¿Le preocupa la imagen que se ha generado de los valencianos?
Me preocupa y me cabrea. Han pasado cosas reprobables y sólo espero que los jueces dicten sentencia. El que la ha hecho que la pague. Pero aquí el 99,99% de los valencianos cumple, trabaja y vive su vida con humildad y esfuerzo. Eso somos realmente los valencianos. Además, esas cosas que aquí han pasado también han pasado en otros sitios, pero parece que sea aquí el único sitio.
¿Le inquieta que la situación política en Catalunya, el pacto entre CIU y ERC, pueda dañar los puentes que se han creado entre ambas comunidades en los últimos años?
A mi, sinceramente, no me preocupa en absoluto ese pacto. Desde que empezó esto mis relaciones con los líderes empresariales catalanes han sido las mismas y con la misma intensidad. Estamos regularmente en contacto y somos buenos amigos. Simplemente, y sin entrar en el detalle, no me puedo imaginar España sin Catalunya y al revés, Hace falta hablar, diálogo, no nos apartemos del diálogo, porque lo otro no beneficia a nadie. Para empezar estaría bien que todos bajaran el tono y que dialoguen.
