El rey Felipe VI tiene prevista una visita a Barcelona este lunes 4 de noviembre. El acto, en el que se entregarán los premios Princesa de Girona ha sido objeto de polémica en plena campaña electoral pero, pese a la solicitud de aplazamiento de JxCat y ERC, la Junta electoral no consideró que pueda interferir en el resultado de los comicios del 10-N. Es solo un capítulo más en la complicada relación que une a Felipe VI con Catalunya. Desde su llegada al trono, ha sido visto con recelo por parte de la población y sus representantes políticos, y eso solo hizo que empeorar tras el discurso que dio el rey después del referéndum del 1-O, y su actitud hacia la voluntad de decidir del pueblo catalán.
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