La mano derecha de Fernando Grande-Marlaska en el Ministerio del Interior, Rafael Pérez, ha presentado su dimisión este martes alegando “motivos personales”. El cese del Secretario de Estado de Seguridad, que se hará efectivo en el próximo Consejo de Ministros, se produce en plena polémica por la labor de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en los casos de corrupción que afectan al Gobierno. Sin embargo, fuentes de su entorno desvinculan su dimisión con la tensión con el Instituto Armado, asegurando que desde hace un tiempo que quería abandonar el puesto.
Pérez, que proviene de la carrera judicial al igual que Marlaska, forma parte del equipo del ministro desde su llegada a Interior, en julio de 2018, tras la moción de censura que desbancó a Mariano Rajoy. Primero asumió las funciones de jefe de Gabinete y, posteriormente, el 17 de enero de 2020, el ministro le nombró secretario de Estado de Seguridad, responsabilidad que ha ocupado hasta la actualidad. Casi siete años en primera fila en una de las áreas más sensibles del Gobierno.
No es la primera vez que Pérez amaga con dimitir. Pero en todas las ocasiones anteriores, hasta hoy, Grande-Marlaska lo había convencido para continuar. Esta última ocasión se había alargado más de lo previsto, afirman las misma fuentes, después de que planease la idea de una crisis de Gobierno, con quinielas que volvían a situar al ministro fuera de Moncloa. “Han asumido que Sánchez sigue respaldando plenamente a Marlaska, por lo que no se vislumbra una salida próxima”, trasladan desde su entorno, desde donde admiten que la dimisión de Pérez hace “un buen roto” en el Ministerio del Interior.
En Interior andaban buscando el momento idóneo para oficializar la dimisión, entendiendo que “sea por una cosa o por otra” —en alusión a las polémicas semanales en Interior— se iba a vincular el cese a una controversía: la filtración de los WhatsApp del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la compra de balas a una empresa armamentística israelí o los audios de una militante del PSOE maniobrando en contra de la UCO. Desde el círculo de Pérez insisten en que su salida no tiene “ninguna” relación con estos asuntos.
Su equipo en el Ministerio se deshacen en alabanzas a la hora de describir el paso de Pérez por Interior: “persona con gran sentido de la responsabilidad”, “nunca ha perdido los nervios, pese a las complicadas situaciones”, “educación exquisita hacia todos”...
Precisamente el ministro, poco antes de conocerse su renuncia, ha defendido en el Senado —y también antes en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros— la gestión de su equipo en estos siete años, frente a las críticas por las presuntas presiones e indagaciones a la UCO.