La jueza de Madrid dio este jueves por concluida la instrucción sobre Alberto González Amador, pareja de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y dictó un auto por el que ve indicios suficientes de fraude fiscal y falsedad documental en dos ejercicios fiscales. Junto a él, también han sido procesados otros cuatro empresarios que habrían colaborado en el fraude.
La titular del juzgado de instrucción número 19 de Madrid da por concluida la pieza principal abierta a raiz de una denuncia de la Fiscalía después de que la Agencia Tributaria detectara en una inspección un fraude al fisco de 350.000 euros entre los años 2020 y 2021. Aun así sigue abierta una pieza por corrupción en los negocios y malversación por la compra de una empresa de la mujer del director de Quirón Prevención.
González Amador intentó llegar a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía para reconocer los delitos, pagar la multa y evitar así una pena de prisión. Sin embargo, las relaciones con el ministerio público se enturbiaron después de que el empresario denunciara al fiscal general del Estado y a la fiscal jefa de Madrid por haber hecho públicos datos sobre los contactos entre su abogado y el fiscal.
Además del fraude, también se le imputa falsedad documental por presentar facturas falsas mediante empresas externas para obtener beneficios fiscales a través de su sociedad Maxwell Cremona Ingeniería y Procesos para el Fomento del Medioambiente.
La instructora considera que se ha detectado que dicha sociedad, con la finalidad de eludir su tributación ante el incremento del volumen de negocios que había experimentado en esos ejercicios, llevó a cabo determinadas conductas con la única finalidad de reducir dicha tributación, deduciéndose indebidamente gastos en virtud de facturas que no se corresponden con servicios realmente prestados.
Desde que se conoció este asunto, la presidenta madrileña ha intentado justificar estos hechos considerando que se trata de una cacería política contra González Amador por ser su pareja. El empresario ha contratacado con la denuncia al fiscal general por un delito de revelación de secretos así como diversas demandas contra miembros de Gobierno y periodistas por llamarle “delincuente confeso” tras conocerse que reconocía el fraude ante la Fiscalía para lograr un pacto de conformidad.
De hecho, el Tribunal Supremo ha desestimado la primera demanda, contra la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero. En el auto, la jueza subraya el “comportamiento fraudulento” de González Amador e indica que “el contribuyente, conocedor de sus obligaciones tributarias, de forma consciente y voluntaria, presentó autoliquidaciones del impuesto de sociedades, por los periodos impositivos comprendidos en el año 2020 y el 2021, no veraces,”.
El novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Alberto González Amador, en el Tribunal Supremo
De hecho, el Tribunal Supremo ha desestimado la primera demanda, contra la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero. En el auto, la jueza subraya el “comportamiento fraudulento” de González Amador e indica que “el contribuyente, conocedor de sus obligaciones tributarias, de forma consciente y voluntaria, presentó autoliquidaciones del impuesto de sociedades, por los periodos impositivos comprendidos en el año 2020 y el 2021, no veraces,”.
La magistrada recoge 15 facturas, una del año 2020 por valor de 620.000 euros, y otras 14 del año 2021 por un importe total de 1.100.985 euros.
