El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este lunes que la oleada de incendios que han arrasado 330.000 hectáreas en agosto no es “fruto de la casualidad, ni de una trama pirómana”, sino resultado de tres factores fundamentales: una política de prevención “claramente insuficiente”, una gestión “inadecuada” del territorio y una situación de emergencia climática que ha hace que los fuegos sean “más virulentos, impredecibles y letales”. “Seamos serios y rigurosos”, ha pedido Sánchez, en un acto en el que ha presentado los diez compromisos del Gobierno para un pacto de Estado contra el cambio climático que vaya más allá de las siglas políticas y que trascienda las legislaturas.
En un acto centrado en el pacto de Estado por el clima, la propuesta estrella del Gobierno para este inicio de curso, el presidente, arropado por sus ministros, ha desgranado los diez compromisos que se incluyen en este pacto climático, entre los que destaca la creación de una nueva Agencia Estatal de Protección Civil y de Emergencias que coordine con las comunidades autónomas la gestión de emergencias como los incendios y las danas, una gestión que debe ser descentralizada, ya que “es más eficaz”.
Otras propuestas son la dotación de más recursos técnicos y humanos permanentes por parte de todas las administraciones públicas para la prevención y la gestión de las emergencias; la adaptación de los municipios al cambio climático, con la creación de espacios como corredores de sombra; promover e instaurar una cultura cívica de protección; la creación de fondos con recursos permanentes a nivel estatal y autonómico y un compromiso de presionar a la Unión Europea para que avance en las políticas medioambientales.
El Estado ha gastado 32.000 millones en cinco años por no prevenir la emergencia climática, ha destacado
Sánchez ha iniciado su intervención con un mensaje de solidaridad y afecto a las familias de los cuatro fallecidos en el combate de los incendios de este verano, así como a los heridos y a los que han sufrido daños materiales de la que ha definido como “la peor oleada de incendios de los tiempos recientes”.
El presidente ha defendido que el pacto se plantea “con espíritu de acuerdo, actitud de escucha y con humildad” y ha anunciado la apertura de un proceso participativo abierto a todos los que quieran plantear sus propuestas, desde la política y la sociedad civil. “Para dar respuesta a una realidad que nos atropella de forma muy sangrante”, ha dicho.
“Queremos un pacto de Estado que trascienda. Pido a todos los políticos que no polaricemos con esto, dejemos ese asunto al margen de las disputas territoriales y partidistas”, ha pedido el presidente, que ha defendido la necesidad de “mirar a largo plazo” para prevenir los efectos destructivos de la emergencia climática. “Hablar de la emergencia climática no es una forma de escurrir el bulto o de sembrar una disputa ideológica”, ha asegurado.
“Queremos un pacto de Estado que trascienda, no polaricemos con esto”, ha pedido a los políticos
En este sentido, Sánchez ha destacado que el gasto de no prevenir fenómenos climáticos ha obligado al Estado a desembolsar en cinco años ”32.000 millones de euros, una cifra que puede parecer abstracta pero que es el presupuesto invertido en educación en ese tiempo”. El cambio climático, ha causado además “la muerte por calor de 20.000 personas, el doble de victimas que por accidentes de tráfico”, ha apuntado.
Por ello, ha lanzado un alegato contra el negacionismo de la extrema derecha y ha asegurado que “el cambio climático mata”. “Tenemos que ser conscientes de todo lo que representa en términos de inseguridad y también de peligro para la vida de nuestros conciudadanos”, ha planteado. “El negacionismo climático que profesa una parte importante como consecuencia de los bulos que se expanden en las redes sociales de alguna de nuestra clase política, resulta tan incomprensible como preocupante”, ha añadido.
En el acto han intervenido también la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aeegesen, y los titulares de Agricultura, Luis Planas, y de Interior, Fernando Grande-Marlaska.