Tras un largo periplo político a la vera de José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba y Pedro Sánchez –fue desde secretario de organización del PSOE hasta jefe de gabinete en la Moncloa, entre otros cargos–, Óscar López (Madrid, 1973) ha cumplido ya un año como ministro de Transformación Digital y Función Pública. Y, como líder de los socialistas madrileños, afronta uno de sus mayores desafíos para disputar a Isabel Díaz Ayuso el trono de la Puerta del Sol en las próximas elecciones autonómicas.
¿Caerá el Gobierno?
“En Madrid hay botellas de champán que se han enfriado... y se han vuelto a calentar”
Carles Puigdemont reunirá mañana a la ejecutiva de Junts para decidir si, como ya le advirtió Miriam Nogueras a Pedro Sánchez, llegó “la hora del cambio” en España, con una consulta a su militancia. ¿Existe temor en el Gobierno a una ruptura que haga inviable la legislatura y aboque a un adelanto de las elecciones generales?
No. Existe máximo respeto por Junts y máxima voluntad de diálogo y de seguir avanzando en acuerdos. Se trata de elegir entre la España del nodo o la España moderna, volver al pasado o seguir avanzando hacia el futuro. Este Gobierno ha demostrado que España avanza en derechos y económicamente. No veo ningún sentido a interrumpir ese avance.
Óscar López, durante la entrevista, en el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública
La ultraderecha está en auge y ni España ni Catalunya son una excepción. Pero la portavoz de Junts, y los de otros grupos de la investidura como ERC o el PNV, les advierten que ya no vale solo con alertar de que la alternativa es el PP y Vox.
No, hay que gobernar e impulsar medidas, es lo que hace este Gobierno que es la demostración, en el mundo entero, de que se pueden hacer políticas justas y que son más eficaces económicamente. Pedro Sánchez es el gran modernizador de la economía española y la prueba del caso de éxito de la socialdemocracia. Nunca antes ningún presidente hizo tanto por cambiar los paradigmas de la economía. Hoy España es líder mundial en crecimiento y creación de empleo, y a la vez avanza en derechos. Eso es lo que no soporta la ultraderecha. El caso español desmonta los mantras de la ultraderecha.
España registra récords de crecimiento y creación de empleo, pero buena parte del debate político gira sobre la presunta financiación irregular del PSOE o a las causas judiciales contra la familia y el entorno de Sánchez. ¿El Gobierno no logra rentabilizar su gestión?
Sí, el Ejecutivo la rentabiliza. De hecho, en las últimas elecciones el PSOE subió un millón de votos. El PP está obsesionado por encontrar un caso Gürtel o Kitchen en este Gobierno, pero esos casos se dieron en el Ejecutivo del PP. Este es un Gobierno limpio, y el PSOE actúa con contundencia y rapidez cuando hay la más mínima sombra de duda. Esa es la diferencia, no somos los mismo. El PP montó los grandes almacenes de la corrupción en España: primera planta, Gürtel, obra pública y mordidas; segunda planta, Kitchen, espionaje a los rivales políticos utilizando los recursos del Estado; tercera planta, Hacienda y Montoro, favores fiscales a los amigos y amenazas a los que no piensan igual.
La sombra de la corrupción
“Es verdad que junio y julio fueron duros, pero el PSOE reaccionó con contundencia”
Las investigaciones sobre supuestas prácticas corruptas y comportamientos de José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García han supuesto un mazazo para el PSOE, y a punto estuvieron de tumbar a Sánchez antes del verano. ¿Está superada esta crisis o todo dependerá de que aparezcan más escándalos?
En Madrid hay botellas de champán que se han enfriado... y se han vuelto a calentar no sé cuántas veces ya. No sé cuántas veces han celebrado el fin de este Gobierno, pero lleva más de siete años y va a seguir gobernando. Es verdad que los meses de junio y julio fueron duros, pero el PSOE reaccionó con contundencia y claridad. Por eso a la vuelta del verano se ha visto todavía más clara la desnudez del proyecto político de Feijóo. No tiene nada, no propone nada, no dice nada: solo fango, fango y más fango. Pero a base de copiar los discursos y las propuestas de Vox, solo se parece y por tanto solo fortalece a Vox. Ese es el drama: una derecha rendida a la ultraderecha.
Sánchez prometió presentar los presupuestos para el 2026, los primeros de esta legislatura. Pero no tienen garantizado el apoyo parlamentario. ¿Puede sostenerse el mandato si se tumban los presupuestos?
No solo puede, debe. Debe porque España es el país de los grandes que más crece y bate récords de empleo, ya con 22,4 millones de afiliados a la Seguridad Social, sube el salario mínimo y las pensiones, y a la vez recorta déficit y deuda. Por tanto, claro que debe. Esta es una España que merece la pena, lo que no merece la pena es volver a la España del nodo que es lo que supone un Gobierno del PP con Vox. Nunca ha sido fácil, pero tengo la impresión de que tendrán que volver a enfriar el champán, porque se les volvió a calentar en verano.
Las cuentas públicas
“No solo puede, sino que debe mantenerse la legislatura aunque no haya presupuestos”
Será el próximo candidato electoral del PSOE en la Comunidad de Madrid, igual que María Jesús Montero en Andalucía, Diana Morant en la Comunidad Valenciana, Pilar Alegría en Aragón o Ángel Víctor Torres en Canarias. ¿Urge una crisis de Gobierno para que puedan centrarse en sus objetivos electorales o consideran que el Ejecutivo es precisamente la plataforma desde donde mejor pueden plasmar su alternativa?
Le corresponde al presidente del Gobierno decidir cuándo cambia o no a los ministros. Pero, políticamente, el contraste de lo que hace el Gobierno con lo que hacen las comunidades del PP es demoledor. El Ejecutivo ha transferido a las autonomías cantidades ingentes de recursos. Madrid ha recibido más de 100.000 millones de euros, más de 40.000 millones más de lo que recibía con Rajoy. ¿A dónde ha ido ese dinero, a la sanidad pública madrileña o al grupo Quirón? Hemos construido entre todos un Estado del bienestar, que en gran parte está en manos de las comunidades. Hay autonomías de la derecha que están desmantelando la sanidad pública y privatizando el Estado de bienestar. No es casualidad que en Madrid haya un millón de personas en listas de espera. Lanzan un mensaje contundente: háganse un seguro privado. Luego pasa lo que hemos visto en Andalucía.
Desde el Gobierno denuncian la gestión de los presidentes autonómicos del PP a los que se enfrentarán en las urnas. A Ayuso, por la polémica con el aborto o los fallecidos en las residencias en la pandemia; a Mazón, por la gestión de la dana; a Moreno Bonilla, por la crisis de los cribados del cáncer; a Mañueco, por la gestión de los incendios de este verano…
La derecha no sabe gestionar, gestiona peor la economía y los servicios. Estoy convencido de que hay una inmensa mayoría de madrileños que aman la sanidad y la educación pública, o la universidad pública, que es la mayor fábrica de igualdad, y a la que están estrangulando. Cuando llegue la hora, los madrileños van a poder elegir y optar por un cambio, para que haya un Gobierno decente, que no sea noticia todos los días por decir una burrada mayor. Y que apoye a la gente que se moviliza contra un genocidio y no a quien protagoniza el genocidio.
Ayuso construyó su liderazgo político en Madrid por contraposición a Sánchez... y ya tiene mayoría absoluta. Las investigaciones sobre el presunto fraude fiscal de su pareja, de momento, van a sentar en el banquillo de los acusados al fiscal general del Estado. Y ahora rechaza la normativa estatal sobre aborto, vivienda o memoria democrática. ¿Cree que hará mella a Ayuso en las urnas?
Es una presidenta alegal, no cumple con la ley de memoria, la del aborto o la de vivienda. Pero son leyes aprobadas para todo el territorio. Una mujer madrileña tiene que tener garantizado su derecho al aborto, no se le puede decir que se vaya a otra parte a abortar. El problema de la vivienda se produce, sobre todo, en Madrid, donde los alquileres y las compras son imposibles. Pero durante años han aplicado la golden visa , con la que muchos millonarios de muchas partes del mundo han comprado manzanas enteras, y se han desregulado los pisos turísticos y se ha expulsado a los madrileños. Ayuso propone no hacer nada, nosotros proponemos construir vivienda pública en Madrid, y prohibir que pueda ser vendida a fondos buitre. La gente tendrá que elegir, y va a ser su voto el que va a decidir.
El jefe de la oposición
“En el PSOE cuestionamos mucho menos a Feijóo que en su propio partido”
Contrapone la gestión de Ayuso y otros presidentes autonómicos del PP a la de Salvador Illa en Catalunya.
El principal acierto de Illa es que su agenda es la de la gente. Su proyecto político para Catalunya se resume en dos palabras: prosperidad compartida. No puedo estar más de acuerdo. En política hace falta mucha más gente como Illa, y mucha menos como Ayuso.
En el Gobierno y el PSOE cuestionan el liderazgo de Alberto Núñez Feijóo en el PP, dicen que por no poner orden en sus filas, pero también por dejarse arrastrar a los marcos políticos de la ultraderecha en materias como la inmigración, el aborto o la ocupación de viviendas. ¿Pero cuanto más crezca Vox más difícil le resultará a Feijóo llegar a la Moncloa?
En el PSOE cuestionamos menos a Feijóo que en el PP, donde le cuestionan mucho más. Feijóo dijo que llegaba para hacer política para adultos y lo que ha hecho es política para ultras. Los primero que hizo fue abrir la puerta de los gobiernos municipales y autonómicos a la ultraderecha, algo impensable en nuestro país, que viene de donde viene. Ese es el legado político de Feijóo. Y ahora compite con ellos copiando su discurso. Este es un PP pequeño y acomplejado, donde además Feijóo tiene una doble pinza. Una externa, Abascal; y otra interna, Ayuso. Y luego hay un gran líder que es Aznar, el que al final pone orden. En el PP mandan los mismos de siempre, el ala dura, pero ahora tienen un competidor externo que se llama Abascal. Feijóo ha decidido entregarse a esa derecha dura que va a acabar con él, porque solo está fortaleciendo a Vox.