Tras su presentación hace ya un año, la Junta de Portavoces ha dado luz verde para que en el próximo pleno se debata la proposición de ley de rebaja del IRPF en su tramo autonómico, de la mano del grupo Popular. Su portavoz, Juan Fernández, ha explicado que se plantea una reducción “drástica” que beneficiaría sobre todo a las rentas medias y bajas. La proposición cuenta con tres enmiendas a la totalidad del PSC, ERC y Comuns por lo que su aprobación se antoja imposible, pero pone en el debate una de las grandes cuestiones que confronta el eje de izquierdas y el de derechas en la Cámara catalana: la presión fiscal en Catalunya.
Por ello, Juan Fernández ha instado a Junts a sumarse a la iniciativa del PP “contra el infierno fiscal” catalán. El portavoz aludía a JxCat al ser preguntado por una propuesta similar que ha presentado este grupo, pero cuya andadura hasta el pleno aún está lejos. Las formaciones del arco de “derechas” en el Parlament han defendido en los diversos debates sobre política fiscal la necesidad de una rebaja impositiva, y habrá qué ver cómo se posicionan la semana que viene ante la iniciativa del PP. Hay tanto sintonía temática como competencia por el espacio electoral. Y el objetivo de liderar el debate sobre la fiscalidad en Catalunya.
De todas maneras, el Govern de Salvador Illa pactó a principios de año una rebaja del tramo autonómico del IRPF con ERC para las rentas más bajas, de hasta 33.000 euros brutos, y especialmente para las inferiores a 12.500. Se subía alguna décima para las rentas más altas, y es menor a la propuesta por el PP.
La proposición de ley define una simplificación de nueve a ocho tramos del IRPF, y aboga por una reducción de la cuota autonómica del 4% para las rentas inferiores a 22.000 euros, un 3,5% hasta los 33.000 euros, y hasta del 2,5% de las que están entre los 33.000 y 53.000 euros. Y el mantenimiento de los tipos constantes a partir de esta cifra, según se indica en la proposición.
El PP de Catalunya entiende que esta rebaja es necesaria teniendo en cuenta sobre todo la inflación de los últimos años, que ha hecho perder capacidad adquisitiva a las familias, mientras que ha permitido al Govern aumentar sus ingresos. Juan Fernández, ante los argumentos que exponen las formaciones de izquierdas, ha señalado que la rebaja impositiva no debe suponer una merma de los servicios públicos ya que ayudaría a “dinamizar” la economía. En esta línea, los populares también han puesto en marcha iniciativas para la rebaja de Sucesiones, Donaciones y Patrimonio. En cualquier caso, será un debate sobre el modelo fiscal, porque el eje de izquierdas cuenta con mayoría.
