El líder del Partido Socialista de Galicia, José Ramón Gómez Besteiro ha reconocido esta tarde que supo de una denuncia de acoso sexual en el seno de su organización meses atrás a través de una tercera persona pero que la organización sólo actuó a partir del momento en que la víctima presentó una denuncia formal en el canal del PSOE.
Esta larga explicación debería servirle a Besteiro para justificar lo que numerosas militantes y dirigentes del socialismo gallego reprochan a su jefe de filas, esto es, la falta de reacción ante unos hechos que él mismo calificó de “repugnantes”.
Lo cierto es que ayer la secretaria de Igualdad del PSdeG, Silvia Fraga, presentó dimisión en la reunión de la comisión ejecutiva del partido, donde comunicó su decisión sin que hasta ahora se sepa con precisión si la renuncia obedece a un modo de protesta contra la dirección o si por el contrario asume la responsabilidad de no haber actuado antes.
Entre tanto, ayer, José Tomé, el supuesto acosador –con el que se supone que Besteiro habló cuando tuvo la primera noticia del caso– renunció hoy formalmente a la presidencia de la Diputación de Lugo pero no al acta como miembro del pleno de la diputación.
Tampoco renuncia a la alcaldía de Monforte donde él y el resto de ediles de su grupo municipal pasan a ser no adscritos para mantenerse en el cargo.
El PSdG ha constituido una gestora para dirigir el partido socialista en Lugo que dirigirá Luis Ángel Lago
