La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha confirmado que muchas personas cometen un error al elegir la ubicación de su lavadora, lo que puede afectar su funcionamiento y generar gastos innecesarios.
Aunque tradicionalmente este electrodoméstico suele instalarse en la cocina, no siempre es posible debido a la falta de espacio. En estos casos, la OCU recomienda valorar opciones alternativas como un modelo más compacto, que con menos de 50 cm de fondo aún puede lavar hasta 7 kg de ropa.
Si esta opción no es viable, el organismo sugiere tres ubicaciones: el cuarto de baño, donde se puede aprovechar un rincón con electrodomésticos más pequeños o apilar la secadora encima; debajo de la escalera, ocultándola con una puerta corredera para mayor estética; o dentro de un armario, instalando estanterías flotantes para optimizar el espacio.
Sin embargo, la OCU advierte que no todos los espacios son adecuados. Colocar la lavadora en el garaje, sótano, balcón o terraza puede traer problemas debido a las temperaturas extremas, la humedad o la falta de ventilación, lo que puede acortar la vida útil del aparato.
Un hombre sacando la ropa de la lavadora
“Los manuales de usuario advierten que hay que instalar la lavadora en una habitación con temperatura controlada”, señala la organización.
Además, si se opta por una ubicación alternativa, se deben considerar los costes de adaptar el suministro de agua y electricidad, lo que podría requerir la ayuda de profesionales para evitar fallos o la pérdida de la garantía del electrodoméstico.
Lavadora
Para optimizar el rendimiento de la lavadora, los expertos recomiendan algunas prácticas clave. Usar el detergente en la cantidad adecuada evita la acumulación de residuos en el tambor y los conductos.
Por último, es importante realizar lavados de mantenimiento con agua caliente y vinagre para prevenir la acumulación de cal y suciedad. Cargar la lavadora correctamente, sin exceder el peso máximo, mejora la eficiencia y reduce el desgaste del motor.



