Un verano de alta montaña
Especial verano
Canillo ofrece aventura, naturaleza y emociones en el corazón de Andorra y los Pirineos
Puente tibetano de Canillo
Enclavada en el noreste del Principado de Andorra, la parroquia de Canillo se alza como un destino imprescindible para quienes este verano buscan apartarse del calor bochornoso y combinar naturaleza, adrenalina y cultura. Con una oferta turística que va desde puentes colgantes hasta pistas de hielo olímpicas, Canillo se consolida como uno de los enclaves más completos del país pirenaico para disfrutar de unas buenas vacaciones.
Un puente entre el cielo y la tierra
Un puente entre el cielo y la tierra El Puente Tibetano de Canillo, inaugurado en 2021, se ha convertido en una de las atracciones más impactantes del país. Con sus 603 metros de longitud y suspendido a 158 metros de altura, es el segundo puente colgante más largo del mundo. Esta pasarela peatonal ofrece vistas vertiginosas de la Vall del Riu, un paraje natural de belleza sobrecogedora. Para los más intrépidos, la zona también ofrece actividades como el jumping, con un salto de 125 metros, o el rápel asistido, una alternativa más accesible pero igualmente emocionante.
Canillo tiene instalaciones para realizar múltiples actividades, desde parque acuático, pista de hielo o rocódromo, además de una atracción impactante como el Puente Tibetano y una naturaleza espectacular
A pocos pasos, el Mirador del Roc del Quer ofrece una experiencia visual única: un balcón suspendido sobre el vacío que permite contemplar la inmensidad del paisaje andorrano.
El acceso a estas actividades se rea- liza exclusivamente en autobús desde el pueblo de Canillo o desde el aparcamiento del mirador. Las entradas pueden adquirirse en la oficina de turismo local o en ponttibetacanillo.com. También se puede adquirir una oferta de paquetes de entradas del Puente + Palau de Gel para disfrutar durante la estancia.
Parque acuático de Canillo
Palau de Gel de Andorra
El Palau de Gel de Andorra, ubicado en el corazón de Canillo, es otro de los grandes atractivos de la parroquia. Su pista de hielo de dimensiones olímpicas —1.800 metros cuadrados— abierto cada día, permite disfrutar de patinaje, hockey y curling.
Pero el hielo no es lo único que ofrece este centro, ni mucho menos. El nuevo rocódromo indoor está pensado para practicar este deporte en un entorno seguro y moderno, con vías y bloques adaptados a cada dificultad. La gran novedad del Palau de Gel es el Splash, una zona acuática interior que incluye tres toboganes de 53 metros de recorrido y una piscina infantil tematizada con pequeños toboganes. Todas las actividades están disponibles durante todo el año, con horarios y tarifas consultables en palaudegel.ad
Canillo cuenta con una naturaleza espectacular
Tras un día lleno de emociones, Canillo invita a relajarse y deleitarse de su va- riada oferta gastronómica con recetas de cocina de montaña y productos pro- pios de la zona. Desde cocina tradicio- nal andorrana hasta propuestas más contemporáneas, los restaurantes de la parroquia ofrecen el broche perfecto para una jornada inolvidable.
Mon(t) Magic Canillo
Mon(t) Magic Canillo propone un día de aventura y ocio. Destaca una activi- dad de unos 40 minutos aproximadamente, en la que descubrir en familia los secretos de la naturaleza de Andorra con los cinco sentidos: el Fornatura. Se trata de un circuito interactivo de interpretación de la naturaleza situado en la zona del Forn de Canillo. Durante el recorrido el pastor Ramón, con la com- pañía de su perro Alai, explica leyendas e historias, y también da pistas de la fauna y la flora de las montañas.
También se puede descubrir el to- bogán de montaña Màgic Gliss y la tirolina, que cuenta con 550 metros de recorrido. Para realizar cualquier activi- dad es obligatorio tener cualquiera de las entradas, ya que el acceso a Mon(t) Magic se realiza mediante la telecabina de Canillo.
Rocódromo para todas las edades
Y es que Canillo no es sólo un destino, es una experiencia que combina modernidad y tradición, naturaleza y aventura, tranquilidad y emoción. Un rincón de los Pirineos que merece ser descubierto.