El 77 por ciento de los mayores de 65 años con movilidad reducida tropieza cada día con barreras arquitectónicas en las ciudades donde residen. Esta situación se recoge en el informe Sumando Voces, elaborado por la Fundación Mutua de Propietarios con la colaboración de la ong COCEMFE, y expone las dificultades de los mayores coincidiendo con la celebración del día de las personas mayores.
El porcentaje de afectados mayores de 65 años ve alterado su funcionamiento cotidiano. Ese tropiezo con las barreras arquitectónicas limita su vida social, en un 68 por ciento, su ocio, en un 52 por ciento y sus actividades domésticas, en un 44 por ciento. En España viven 1,6 millones de mayores de 65 años con discapacidad física y orgánica.
“En una sociedad envejecida con una esperanza de vida creciente, la accesibilidad sigue siendo una asignatura pendiente en nuestro país que condiciona de forma importante la vida cotidiana de las personas mayores”, afirma Cristina Pallàs, directora de la Fundación Mutua de Propietarios.
Déficit
El informe exhibe que sólo el 27% de las viviendas habitadas por los mayores con movilidad reducida cuenta con un nivel de adaptabilidad completo
La sensación de los protagonistas, los mayores de 65 años con dificultades de movilidad, es de que su grado de autonomía no llega al aprobado: 4,92 sobre 10, lo que pone encima de la mesa la necesidad de proseguir con la eliminación de barreras arquitectónicas. El informe señala como sólo el 27 por ciento de las viviendas en las que residen mayores con movilidad reducida están totalmente adaptadas a sus necesidades.
Eso significa que casi la mitad de los mayores con movilidad reducida no pueden realizar por sí mismos las tareas del hogar y que el 27 por ciento las realiza con suma dificultad. El 35 por ciento no puede cocinarse y el 20 por ciento es incapaz de proceder a su propia higiene o al control de su medicación.
La percepción es que este colectivo “vive situaciones de discriminación múltiple, derivadas no sólo de la edad y la discapacidad, sino también de un entorno físico, social y económico que no responde a sus necesidades”, manifiesta Anxo Quiroga, presidente de COCEMFE. El papel de los familiares o amigos cuando conviven con ellos es clave. Éstos se convierten en su principal apoyo en el 75 por ciento de los casos. Pese a ello, el 34 por ciento de los casos debe recurrir a personal externo remunerado.
