“Gran parte de propietarios tiene incertidumbre a la hora de poner su vivienda en el mercado”
Entrevista a la Directora General de Grupo Mutua Propietarios
Laura López Demarbre, que confía en las soluciones aseguradoras para los propietarios, arranca su periplo al frente del grupo con la promesa de duplicar la facturación en el 2040
Laura López Demarbre afronta con ilusión su nueva etapa al frente de Grupo Mutua Propietarios
La empresa de seguros más longeva de España, el Grupo Mutua de Propietarios, tiene como primera ejecutiva a una mujer. Laura López Demarbre lleva una larga carrera en la compañía y ahora que ha alcanzado la dirección general está preparando el salto para asumir grandes retos para los próximos años. No hay conformismo. Su receta para seguir el camino tras los primeros 190 años de historia de la compañía es pisar el acelerador.
-Después de una extensa trayectoria en la empresa, usted ha sido nombrada Directora General de la compañía con mayor antigüedad. ¿Qué sensación tiene? ¿Confianza o vértigo?
-Confianza, ilusión y también respeto por el legado de 190 años de historia, al que he tenido la oportunidad de contribuir en el último periodo siendo responsable de la dirección estratégica del grupo. Un periodo en el que realizamos las operaciones de integración de las entidades DAS Seguros y Mutual de Conductors, y en el que definimos el vigente Plan Estratégico 2024-2026. Procesos muy complejos y de elevada intensidad que me han proporcionado un conocimiento muy profundo de las personas que forman los equipos del Grupo. Por todo ello, y por el importante apoyo del Consejo de Administración, siento más confianza que vértigo en esta nueva etapa profesional.
-¿Cuáles son los objetivos principales para el Grupo que se marca en esta nueva etapa?
Seguir construyendo la cadena de valor del propietario forma parte de la matriz del Grupo como especialistas en la protección integral del propietario y sus inmuebles
-El primero lo anuncié en el momento de mi nombramiento: duplicar la facturación del Grupo en 2040. Para alcanzarlo, en primer lugar, hay que afrontar grandes retos como el envejecimiento, el cambio climático, la transformación digital y la macro volatilidad económica. Otro aspecto muy importante es seguir construyendo la cadena de valor del propietario que parte de la matriz del Grupo como especialistas en la protección integral del propietario y sus inmuebles. A lo largo de estos años hemos construido un modelo de integración vertical dentro del Grupo que empezó con la incorporación de Sensedi en 2014, que ofrece los servicios técnicos y periciales; en 2019 se unió onRed, especializada en asistencia y reparaciones y, en 2023 onLygal, que nos aporta soluciones legales para vida reales. Toda esa integración acaba formando parte de una cadena de valor del propietario que da sentido a la relación con el cliente de principio a fin. Por tanto, el objetivo en los próximos años es potenciar todas esas sinergias, todos los servicios, productos, soluciones, para que realmente podamos estar al lado del propietario o de los inquilinos, que también forman parte de nuestra historia, con una excelente calidad de servicio.
-¿Sólo con potenciar las sinergias se puede llegar a duplicar la facturación?
-Como parte de nuestra esencia de negocio, también debemos evolucionar conforme a las nuevas necesidades del mercado ofreciendo nuevos productos y nuevas soluciones, que sigan protegiendo al propietario y sus inmuebles. Y a la vez seguiremos apostando por un crecimiento inorgánico a través operaciones potenciales que encajan en nuestra estrategia corporativa. La integración eficiente de nuevas entidades especializadas en distintos ámbitos relacionados con la propiedad inmobiliaria nos ha permitido conformar lo que hoy es el Grupo Mutua Propietarios. En definitiva, queremos consolidar todo lo logrado hasta ahora y detectar los nuevos retos que marque la sociedad para seguir protegiendo a los propietarios y sus inmuebles.
-¿Hacia dónde se encaminan los productos aseguradores?
En los próximos años va a ser clave tener una alta capacidad de adaptación. En nuestro ámbito detectamos que hay unos modelos sociales de vivienda tradicional que están cambiando. Ese modelo familiar, intergeneracional de abuelos que vivían con los padres y sus hijos, ha ido cambiando y, hoy en día nos encontramos ante un modelo en el que cada vez hay más personas que viven solas. Antes solo los jóvenes se iban de casa, pero ahora los abuelos se quedan viviendo solos. Esta situación, unido a que el 30% de la población tendrá más de 65 años en 2050 y al déficit de vivienda, nos sugiere que tenemos que estar atentos a estos cambios de estilo de vida y vivienda que van a aparecer, y ser capaces de adaptarnos. En este sentido, lo que estamos viendo es que el coliving o el cohousing ya no solo son para la gente joven que tiene dificultades para pagar una vivienda de forma unilateral y tiene que compartir, sino que las personas mayores están buscando un modelo más humano y flexible de relación y de vivienda para los próximos años. En definitiva, tendremos que dar respuesta a estos nuevos modelos para dar servicio a la sociedad.
-¿Puede aparecer un seguro especial para fomentar ese coliving o cohousing con gente mayor? ¿El mundo del seguro en el sector de la vivienda puede evolucionar hacia esos esquemas?
- Creemos que sí, pero esa evolución vendrá dada también por la evolución de la sociedad. Realmente entramos en un periodo en el que mirar al pasado ya no es necesario para predecir el futuro, sino que vamos a tener que ser capaces de tomar decisiones y adaptarnos de forma rápida, porque determinados cambios, como por ejemplo el climático, ya no cumplen con los patrones del pasado. Ante esta evolución, la industria aseguradora tendrá que analizar y promover soluciones de producto, de servicio al cliente… que también tendrán que tener en cuenta los cambios legislativos o regulatorios. Entonces veremos si se trata de mejorar soluciones actuales o de crear nuevos productos para alcanzar el objetivo de seguir protegiendo al propietario y al inquilino, como hacemos desde hace más de 190 años.
-Por su experiencia en el sector, ¿Cree que el cliente precisa de productos que le reporten más ventajas de las que ya tiene?
-Sí, probablemente habrá que adaptar los productos actuales porque siempre surgen nuevas necesidades. En2003 fuimos pioneros lanzando el producto de impago de alquiler, que incluye servicios preventivos desde el análisis de la solvencia del inquilino hasta la defensa jurídica desde el primer impago, y recientemente hemos presentado el producto dirigido al alquiler temporal. Esa solución hace diez años no tenía tanto sentido, pero cuando lo lanzamos ya era un producto que nos demandaba el mercado. Y esto es lo que tenemos que seguir haciendo para los próximos años.
-España tiene un problema global en el tema de la vivienda. ¿El miedo de los propietarios a los impagos de los alquileres y a las ocupaciones frena la posibilidad de alquilar más viviendas?
-El miedo a los impagos y a las ocupaciones existe y pesa en la decisión a la hora de poner un inmueble en alquiler, pero no tiene por qué convertirse en un freno. A través de los informes que realizamos para disponer de un termómetro de la actualidad, vemos que una parte significativa de los propietarios siente incertidumbre a la hora de poner su vivienda en el mercado. En concreto, el estudio realizado por nuestra filial onLygal, señala que un 53% de los propietarios percibe esta incertidumbre y estrés al alquilar su vivienda pero que, si cuenta con acompañamiento legal y una gestión profesional del riesgo, se sienten seguros y se reduce su inquietud.
-¿Sería necesaria una ley más clara respecto al mundo de las ocupaciones en España?
-Las funciones de las aseguradoras están reguladas por las normativas vigentes europeas y españolas, y bajo la supervisión de la Dirección General de Seguros Fondos y Pensiones. Nuestra misión, como grupo asegurador, es proteger a nuestros mutualistas y clientes, es decir de los propietarios e inquilinos de los inmuebles. Y, por tanto, tenemos que adaptarnos a la legislación que en cada momento exista para proteger a nuestros clientes. Dicho esto, lo que sí que necesitamos son normativas claras que no induzcan a confusión en su aplicación y, sobre todo, que sean perdurables en el tiempo. Creemos, al igual que muchas otras aseguradoras, que hay un exceso de regulación, cuyo cumplimiento genera tanta confusión como elevados costes para su gestión.
-¿Qué demanda especialmente su cliente? ¿Más tranquilidad si decide alquilar?
-Cuando un cliente contrata un seguro desea conseguir tranquilidad y protegerse de un riesgo futuro que es incierto, volviendo a los fundamentos básicos del seguro. Y, por tanto, frente a estos cambios legislativos, el cliente demanda la protección que le puede dar un seguro de impago de alquiler, un seguro de hogar o un seguro de comunidades.
-Ustedes crearon el cuerpo de Bomberos que acabó siendo el de la ciudad de Barcelona. ¿Algún reto nuevo en la chistera que tenga ese impacto social?
Desde su nacimiento con un marcado fin social hasta la actualidad, Grupo Mutua Propietarios se ha caracterizado por su fuerte compromiso con la sociedad. Fruto de este compromiso nació en 2017 la Fundación Mutua de Propietarios, una institución no lucrativa creada con la misión de mejorar la calidad de vida de las personas con movilidad reducida, promoviendo una mejora de la accesibilidad al edificio y su entorno. Y es en esta Fundación en la que vamos a volcar nuestra acción social en los próximos años.
En la actualidad, hay 1,6 millones de españoles mayores de 65 años con una discapacidad física y orgánica, y nuestro objetivo es seguir invirtiendo en concienciar y ayudar, apoyándonos en la tecnología, para dar respuesta a las necesidades de este colectivo al que algún día todos nos incorporaremos cuando nos hagamos mayores.
-¿El papel de la fundación en esta nueva etapa crecerá sustancialmente en fondos y retos?
-La apuesta es que la Fundación siga creciendo en fondos durante los próximos años. De hecho, contamos con un programa de crecimiento y expansión de partners que nos permitirá seguir repartiendo más ayudas y desarrollando una función social más amplia. Otro aspecto que también trabajamos desde la Fundación es la concienciación del público más joven sobre la importancia de la accesibilidad, con el objetivo de que tengan un criterio propio.
-De todos los planes de expansión ¿existe alguno que sea un sueño para usted?
-Si, por supuesto, tengo un gran sueño que ya anticipé en el acto de celebración del 190 aniversario: que Grupo Mutua Propietarios realice el primer seguro de vivienda cuando se viaje a Marte. Y más pegado a la actualidad, nos hemos marcado como objetivo hacer una reflexión sobre los modelos de suscripción que tenemos y evolucionarlos para su adaptación al calentamiento global del planeta. En concreto, según la agencia meteorológica de la ONU, la temperatura en Europa aumenta el doble que en el resto del planeta y el año 2022 marcó un hito con temperaturas que se dispararon 2,3 °C por encima de la media del período preindustrial.
-¿En qué puede cambiar esa evolución de riesgos?
-En nuestro tipo de seguros de multirriesgo se basa en las características que tiene ese edificio o el entorno. La siniestralidad depende del tipo de lluvia, de los vientos, de las características del edificio. Todo ello altera la manera de analizar el riesgo.
-¿El riesgo del cambio climático puede provocar que más gente en España opte por asegurar su vivienda?
Tener mayor conocimiento del seguro ayudaría porque, a diferencia de lo que ocurre en el mundo anglosajón, en España no se percibe tanto su función social
-Creo que sí. Los episodios vividos, como la dana de Valencia, han generado situaciones muy complicadas y, ante ello, el seguro tiene una función social importantísima que a veces se desconoce. Cuando el cliente percibe que hay una sensación de riesgo mayor porque no puede predecir lo que le va a pasar a su vivienda y a su edificio, se incentiva la contratación y el uso del seguro.
-¿La gente debería tener más cultura financiera y de seguros para saber más y mejor lo que contrata?
-Sí, tener un mayor conocimiento ayudaría porque, a diferencia de lo que ocurre en el mundo anglosajón, en España no se percibe tanto la función social que desempeña el seguro. Como sociedad y como sector tenemos un reto pendiente para que el cliente pueda entender qué es lo que está contratando y cómo eso le protege.