Stephen Graham: “El móvil educa y paterna a nuestros hijos tanto como lo hacemos nosotros”
Entrevista
El actor británico es también guionista y productor ejecutivo de 'Adolescencia', la nueva serie de Netflix

Stephen Graham posa para los fotógrafos en la presentación de la serie en Londres

Es una figura habitual tanto en el cine como en la televisión británica, pero también ha participado en numerosas superproducciones de Hollywood, y aunque como actor le ha ido tan bien como para que su reina le reconozca con la orden del imperio británico, Stephen Graham también brilla en una nueva etapa en la que es además guionista y productor ejecutivo. Su más reciente propuesta, Adolescencia , recien estrenada en Netflix, ha fascinado a los críticos y se perfila como una temprana candidata a competir por los grandes premios. Cada episodio cuenta en tiempo real lo que ocurre a partir de que un adolescente de 13 años sin antecedentes criminales, Jamie Miller, acuchilla a una compañera de escuela en un callejón.
¿Cómo surgió la idea para Adolescencia ?
Con Phillip Balantini hicimos una película, Hierve, filmada en una sola toma, que fue bien recibida, por eso nos pidieron hacer una serie con esa estructura. Se me ocurrió hacer algo así, porque leí una noticia sobre un muchacho que acuchilló a una chica de su edad y la mató. Luego vi en la BBC una historia similar. Ambas ocurrieron en puntos opuestos de Inglaterra. Estos hechos me partieron el corazón y me llevaron a cuestionarme qué está pasando en la sociedad hoy para que un joven haga algo semejante. Pensé que sería interesante contar esta historia, para generar conciencia sobre el problema. Luego se me ocurrió hacer cuatro episodios diferentes. Todos sabemos lo que hizo, por lo que no es un thriller en el que hay que descubrir al asesino. La gran pregunta es por qué lo hizo.
¿Cómo es el proceso de rodar todo un episodio en una toma?
Es una maravillosa experiencia para cualquier actor, porque inicialmente nos pasamos toda la semana ensayando y analizando el guion, para el que contamos con Jack Thorne quien nos ayudó a entender lo que le pasa a cada uno de nuestros personajes, las relaciones entre ellos y la dinámica de las conversaciones que tienen lugar. Analizamos cada palabra, y todas las razones de los participantes. Teníamos que entender por qué Owen dice lo que dice, ya que no tenemos su edad, pero él tiene una comprensión del lenguaje que no es la nuestra. Una semana después, ensayábamos todo el episodio con la cámara, luego de que Phil y Matt, nuestro director de fotografía, habían diseñado meticulosamente el camino que tenían que recorrer de principio a fin. Así nos pasábamos la semana organizando la coreografía. Es un proceso muy orgánico y natural. Finalmente llegaba la tercera semana, en la que unes lo que estaba preparado con la espontaneidad que te da el sentir que estás en un escenario haciendo una obra de teatro, pero con el naturalismo y el realismo que te da trabajar en televisión.
¿Cómo fue filmar con Owen en el papel de Jack?
Con Phil estamos obsesionados con un programa documental que se llama 24 horas en custodia policial . Lo que queríamos hacer era una serie que mostrara el procedimiento pero lejos de lo que se suele ver en los programas de ficción. Nos interesaba cambiar la estructura, y que no solo se viera desde la perspectiva de la familia de la víctima. Vamos, esa historia también se tiene que contar. Pero buscábamos cambiar la narración, y por decidimos mostrarlo desde la mirada del niño que ha cometido el crimen, tratando de evitar los clichés habituales, poniendo el énfasis en este padre que nunca le ha levantado la mano a su hijo. El padre no es violento, la madre no es alcohólica, el niño no ha sido abusado ni mental ni sexualmente por ningún tío u otro integrante de la familia. Decidimos eliminar todas esas posibilidades y ver por qué ha hecho esto. Jack es un guionista asombroso, que investigó los aspectos mas oscuros de las redes sociales. De allí vino todo el tema del célibe involuntario.
¿Actuar en la serie cambió su mirada sobre cómo cría a sus hijos?
En cierta forma si. Uno mira estas situaciones y piensa que nunca le pasaría algo así. Pero lo cierto es que es algo que le podría ocurrir a cualquiera. Los Miller son una familia normal. Son gente trabajadora, decente, que se quieren. Podrían ser tus vecinos e incluso podría tratarse de tu casa. Nos interesaba generar conversaciones en la audiencia. Porque te guste o no, el mundo en el que vivimos es completamente diferente al que existía cuando nosotros eramos niños. El móvil educa y paterna a nuestros hijos tanto como lo hacemos nosotros. y a veces, incluso más.
No hay una comprensión cabal del impacto de las redes en las mentes jóvenes...
Es exactamente así. Eso es precisamente lo que queríamos analizar. Creo que todos tenemos que asumir cierta responsabilidad con cómo se están criando las nuevas generaciones. Son nuestro futuro.
¿Hay algo que se puede hacer para solucionar la frustración que las redes sociales generan en los adolescentes?
No lo sabemos. No tenemos las respuestas. No acusamos a nadie y tampoco decimos cual es la solución. Pero al menos podemos comenzar el debate para ver como lo resolvemos. La verdad es que Adolescencia no es una serie dramática sobre extraterrestres en marte. No es ciencia-ficción. Hablamos de algo muy real. Son incidentes que han ocurrido. Como sociedad tenemos que examinarlos.