MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
Más de 1,1 millones de personas, entre ellas más 500.000 niños, viven en Myanmar en condiciones desesperadas en asentamientos y se enfrentan a una grave escasez de alimentos, agua potable y refugio, así como a un riesgo cada vez mayor de enfermedades y explotación.
El mayor asentamiento de personas refugiadas del mundo se enfrenta a una crisis humanitaria que dura ya ocho años, en medio de un grave recorte de fondos, agravado por una nueva afluencia de personas que huyen de la violencia y el hambre, lo que ha llevado la respuesta humanitaria al límite, como denuncian las ONG.
En este sentido, desde World Vision alertan de que la crisis es consecuencia directa de la grave escasez de fondos: el Plan de Respuesta Conjunta solo ha recibido el 36% de su objetivo de 934 millones de dólares, lo que ha obligado a las agencias de ayuda a reducir los servicios vitales para los residentes más jóvenes de los campamentos.
Ocho años después del inicio de la crisis rohingya, la respuesta de World Vision a la crisis en Bangladesh ha prestado apoyo a más de 416.000 personas, entre ellas 246.000 niños, en 19 localidades, proporcionando asistencia integrada en materia de seguridad alimentaria, salud, educación, protección y medios de vida para restaurar la dignidad y fomentar la resiliencia a largo plazo.
Las necesidades son abrumadoras, según World Vision, que está trabajando con las personas refugiadas y las comunidades de acogida para intensificar las acciones locales y las soluciones diseñadas para construir un futuro más esperanzador.
En palabras del subdirector de respuesta de World Vision a la crisis en Bangladesh, Mofizur Rahman, “a pesar de los retos, la resiliencia de la comunidad rohingya es realmente inspiradora y las iniciativas de economía circular no solo se limitan al procesamiento de residuos, sino que crean empleos verdes, proporcionan recursos vitales como agua potable y restauran la dignidad”.
RESPUESTA ECOLÓGICA
Por otro lado, la respuesta humanitaria ecológica de World Vision en los campamentos rohingya está transformando más de 2.200 toneladas de residuos mensuales en recursos mediante enfoques de economía circular. Más allá de la gestión de residuos, se están creando empleos verdes vitales y medios de vida sostenibles.
Las iniciativas incluyen redes de agua alimentadas con energía solar que producen 600.000 litros diarios para 38.000 personas, compostaje para huertos comunitarios, plantación de árboles, mantenimiento de la energía solar y reciclaje de residuos para convertirlos en artesanías. Estos esfuerzos protegen la salud y el medio ambiente, al tiempo que empoderan a cientos de personas con nuevas habilidades, medios de vida e ingresos.
“Esta crisis es una prueba profunda para la solidaridad mundial, hacemos un llamamiento urgente a la comunidad internacional para que intensifique sus esfuerzos, no solo con fondos, sino con medidas audaces y una visión a largo plazo”, ha concluido el líder regional de World Vision para Asia Meridional y el Pacífico, Cherian Thomas.