Cuatro detenciones se han llevado a cabo durante este fin de semana en Valladolid en relación con violencia machista y doméstica. Dos hombres han sido arrestados por delitos de violencia machista, un tercero por quebrantar una orden de alejamiento, y una mujer ha sido detenida también por violencia doméstica contra su pareja.
La primera de las detenciones tuvo lugar en la madrugada del pasado domingo, después de que una mujer avisara a la policía de que su expareja, con una orden de alejamiento en vigor, se encontraba en el mismo establecimiento de hostelería en el que estaba ella, sin intención de irse.
De acuerdo con los datos aportados por la mujer a la patrulla que se acercó hasta el lugar, el hombre se había dirigido con sonrisas hacia ella en varias ocasiones. Ha terminado detenido por quebrantar ala orden de alejamiento, derivada de una sentencia de un juzgado de Valladolid.
Violencia
Una mujer ha golpeado a su agresor con un martillo después de que este la agarrara por el cuello, la zarandeara y golpeara
Sobre las 21:30 del mismo día, agentes de la Policía Municipal tuvieron también que acudir a un domicilio del barrio de la Victoria tras recibir el aviso de un vecino. Este alertó de que estaba escuchando una fuerte discusión en una vivienda, con cristales rompiéndose, algunos de los cuales cayeron a la calle.
A su llegada, encontraron a una mujer muy alterada y llorando y a un hombre con evidentes signos de embriaguez. Ambos declararon ante la policía que habían discutido y que la mujer había golpeado al hombre con un martillo después de que este la agarrara por el cuello, la zarandeara y golpeara. La mujer ha terminado detenida por un delito de violencia doméstica y el hombre por un delito de violencia machista.
Finalmente, agentes de la Policía Municipal detuvieron también, pasadas las 23 horas del domingo, a otro hombre también por violencia machista. El arrestado se presentó en el lugar de trabajo de la mujer y la agredió.
Según el relato de la víctima, habían sido pareja durante dos años, pero hacía una semana que ella había decidido ponerle fin a la relación. Esta no era la primera ocasión en la que el hombre la agredía.