Un vuelo de Inglaterra a Alicante ha tenido una escala inesperada en Francia porque un grupo de pasajeros estaba celebrando una despedida de soltero en el aire. Debido a los disturbios que estaban causando, el piloto se ha visto obligado a desviarse hacia ese país.
Ocurrió el pasado viernes 26 de septiembre. Todo empezó antes del despegue, ha confirmado al Daily Mail Tania, una pasajera. El grupo ya venía cometiendo actos de indisciplina en el aeropuerto. Cuando se subieron al avión cambiaban de asiento constantemente, incumpliendo las normas de seguridad, y hablaban con lenguaje soez frente a los niños.
Previo al vuelo
El grupo ya había hecho escándalo antes del despegue, pero en el avión empezaron a beber alcohol, a pelearse y a escupirse
Una vez en el aire, los hombres comenzaron a beber alcohol que habían comprado en el aeropuerto. “Lo primero que hicieron fue abrir botellas de licor y hablar de manera inapropiada en presencia de menores”, ha contado Tania.
La situación, ya de por sí escandalosa, tocó fondo cuando dos integrantes se empezaron a pelear a golpes de puño y a escupirse. El novio intentaba mantenerse al margen de la situación.
Hubo quienes se resistieron a la detención
Al mismo tiempo que varias personas recurrían a la tripulación para que hicieran algo, el grupo repartía golpes y patadas por todos lados. Pisoteaban los asientos y una mujer recibió un golpe en la cabeza.
La respuesta de la tripulación de Ryanair fue realizar un aterrizaje no programado en Toulouse, Francia, para que la policía de ese país pudiera intervenir.
Ryanair es una aerolínea de bajo coste con sede en Dublín, Irlanda
Una vez en tierra firme, la policía ingresó en el avión y detuvo a los pasajeros que estaban involucrados el alboroto. Hubo varios que se resistieron a las autoridades, como el padre de un niño que aseguraba que no formaba parte del escándalo.
La testigo ha destacado el accionar de la tripulación de la aerolínea low cost: “El equipo de cabina estuvo absolutamente sobresaliente, manteniéndose tranquilo, profesional y haciendo todo lo posible por controlar la situación. Supieron gestionar una circunstancia increíblemente compleja con gracia, y merecen ser reconocidos”.
Ryanair, por su parte, ha confirmado que hubo una “conducta disruptiva de un pequeño grupo de pasajeros” y que estos “fueron desembarcados antes de continuar rumbo a Alicante”. El caso ha quedado bajo investigación de las autoridades locales.
Después de que se llevaran detenidos a todos los implicados, los pasajeros que por fin iban a volar a Alicante concluyeron la situación con un aplauso.


