Bernadette Delmotte, ciudadana de origen belga, perdió la vida el 13 de junio mientras lavaba su Fiat 500 en su casa en Bissy-sur-Fley, Francia. Según la investigación de la Gendarmería Nacional y relatos de sus allegados, la ventanilla eléctrica del vehículo se cerró accidentalmente atrapando su cuello, lo que le causó asfixia y la muerte.
Detalles del trágico accidente y la confusión inicial
Familiares reclaman mayor seguridad y explicaciones
El vehículo comenzó a rodar hacia atrás porque no estaba puesto el freno de mano, y Bernadette se asomó por la ventanilla para activarlo y detener la marcha. En ese momento, tocó sin querer el botón del cierre automático y la ventana se elevó, atrapándole el cuello.
Sus amigas, preocupadas por su ausencia, hallaron el cuerpo con la cabeza y un brazo dentro del coche. La autopsia confirmó muerte por estrangulación accidental, descartando intervención de terceros.
El hermano de Bernadette, François, relató el desconcierto inicial ante el misterio del accidente. Tras la confirmación del accidente, envió una carta al fabricante del automóvil solicitando medidas preventivas para evitar tragedias similares, aunque aclaró que no busca compensaciones. Sus familiares aún reflexionan sobre la importancia de contar con sistemas de seguridad en los vehículos, como sensores antiatrapamiento.


