La jueza de instrucción 2 de Sabadell ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza para Santiago Laiglesia, el principal sospechoso del crimen de Helena Jubany. Este es un paso casi decisivo para la resolución de un caso que se alarga desde el año 2001. El investigado se ha negado a declarar este viernes en el juzgado. La juez decidió citarlo después de que la Policía Nacional hallara ADN suyo en el jersey que vestía la víctima el día de su asesinato. Al finalizar la comparecencia, la Fiscalía y la acusación particular, que ejerce la familia de Jubany, habían reclamado su ingreso en prisión provisional por riesgo de fuga y de destrucción de pruebas, petición que ha sido atendida por la jueza. El padre y el hermano de la víctima, que esperaban a las puertas de los juzgados, se han abrazado al conocer la decisión, conscientes de que se despeja el camino para aclarar quién acabó con la vida de la joven hace 24 años. La familia considera que esta medida empieza a “romper la situación de impunidad, de lentitud, de demora, de llevar a la justicia a los autores del asesinato de Helena Jubany”, según ha expresado el abogado, Benet Salellas, que considera que la celebración del juicio “está cerca”.
Helena Jubany fue asesinada el 2 de diciembre de 2001 al ser arrojada al vacío desde lo alto de una azotea situada en un edificio de Sabadell, donde vivían Santiago Laiglesia con su pareja Montserrat Careta, que se suicidó en prisión clamando por su inocencia. El cuerpo de la víctima fue hallado desnudo y con quemaduras en diversas partes, las más importantes, en las zonas correspondientes a su ropa interior. En 2005, a pesar de que había varios sospechosos, todos ellos miembros de la sección Natura de la Unió Excursionista de Sabadell, a la que pertenecía la víctima, el juez archivó el caso por falta de pruebas.
La familia de Helena Jubany celebra con un abrazo la prisión provisional de principal sospechoso del crimen
En un auto al que ha tenido acceso Guyana Guardian, la jueza considera que “ahora existen unos indicios de criminalidad que hasta el momento no existían y que incriminan de forma tangible a Laiglesia”. El nuevo hallazgo de ADN en el jersey de la víctima ha resultado decisivo y la magistrada destaca que junto al resto de indicios “son bastantes motivos para creer responsable criminalmente del delito investigado”. Los restos biológicos encontrados en la prenda permiten situar al investigado “en el lugar de los hechos y en el momento de producirse, revelando de forma objetiva un contacto físico entre el investigado y la fenecida”.
“Sería compatible tanto con una agresión física como con la maniobra de desvestir a la víctima antes de ser precipitada, lo que en cualquier caso determinaría su participación causal en los hechos”, argumenta. Además, la magistrada añade que “al haberse acogido a su derecho a no declarar, el investigado no ha aportado explicaciones razonables acerca de las nuevas conclusiones incriminatorias del informe científico”.
El abogado de la familia Jubany, Benet Salellas, comparece ante los medios frente a los juzgados de Sabadell acompañado del hermano y el padre de Helena Jubany
La jueza justifica la prisión provisional al considerar que existe riesgo de fuga y de destrucción de pruebas. Coincide con el criterio de la Fiscalía de que hay peligro de que Laiglesia huya debido a la alta pena de prisión a la que se enfrentaría por el delito de asesinato y por el riesgo de que influya en el resto de testigos que pueden conocer lo que ocurrió el día del crimen, todos ellos amigos del investigado en la Unió Excursionista de Sabadell. “Presumiblemente en el delito intervinieron varias personas que han quedado fuera de la causa por diversos motivos. Podría aprovecharse Laiglesia para, estando en libertad, presionar o influir en tales personas, principalmente de cara a prestar declaración en el juicio de una manera favorable a sus intereses”, resalta.
La jueza deberá decidir si abre juicio oral a los dos investigados en la causa
Las familiares de Montse Careta, que se suicidó en prisión clamando por su inocencia han desplegado una pancarta frente al juzgado de Sabadell
La jueza también ve clara la participación de Careta en los hechos, si bien destaca que su pareja, Laiglesia, tuvo que ayudarla para cargar el cuerpo por la azotea del edificio donde ambos vivían. “El traslado del cuerpo inerte de la víctima hasta el lugar desde el que fue arrojado difícilmente podría haberse llevado a cabo por una sola persona. Difícilmente por Montserrat Careta y debiera ser auxiliada por alguna persona, siendo la primera de las opciones más razonables que esa persona fuera precisamente su compañero sentimental, quien convivía con ella o, al menos, pasaba mucho tiempo en su compañía en dicho domicilio”. También recuerda que en el registro que se practicó en el domicilio donde vivían ambos se encontraron cerillas como las que se utilizaron para quemar el cuerpo de la víctima y medicamentos como los que se hallaron en el cuerpo de la joven.
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La instrucción volvió a reabrirse el 1 de diciembre de 2021, el día antes de que prescribieran los hechos. El juez imputó a Xavier Jiménez, amigo de Laiglesia, a quien se atribuye la confección de unos anónimos que recibió la víctima meses antes de su asesinato. En la puerta de su vivienda aparecieron una horchata adulterada con benzodiacepinas y unos croissants junto a unas notas anónimas. Los investigadores creen que sirvieron de experimento previo a la ejecución del crimen. La justicia consideró que Jiménez “participó activamente” en el asesinato. Ahora, la jueza también cree que Laiglesia participó “en la redacción de los anónimos” junto a otras personas del entorno cercano del mismo. “Este indicio se vio reforzado por el informe pericial que atribuye la redacción material a Xavi Jiménez, amigo de Laiglesia”, apunta. Ambos son los dos imputados por el crimen y presumiblemente se enfrentarán a un jurado el año que viene.
El imputado ha entrado a los juzgados a las 9:28 h acompañado de dos abogados de donde ya no ha salido. A las puertas le esperaban familiares de Montse Careta que han desplegado una pancarta en contra de las violencias machistas.
