La Guardia Civil investiga las circunstancias de la muerte de George Dan Romila, vecino de Venta de Baños (Palencia) de 46 años desaparecido el pasado 26 de agosto, tras confirmar que el cadáver localizado el domingo 14 de diciembre corresponde al hombre y que el cuerpo presenta un disparo, aunque inicialmente se descarta la intervención de terceros, según han informado fuentes de la investigación.
El hallazgo se produjo en la mañana del domingo, cuando un ciudadano localizó el cuerpo en una zona de difícil acceso, en un terraplén entre una masa arbórea situada en la bifurcación de las autovías A-62 y A-67, y dio aviso inmediato a los servicios de emergencias. Hasta el lugar se desplazaron varias patrullas de la Guardia Civil, incluido un equipo de la Policía Judicial, que inició las diligencias para la identificación del fallecido y el esclarecimiento de los hechos. Ese mismo día se pudo comprobar que la vestimenta y la documentación correspondían con las del vecino desaparecido, quedando la identificación definitiva pendiente de la confirmación forense.
Tras las oportunas verificaciones, la Guardia Civil confirmó este martes que el cadáver se corresponde con George Dan Romila, de nacionalidad rumana y aficionado a las motos, que residía en España desde hace casi tres décadas. La autopsia ha confirmado que el cuerpo presenta un disparo y junto al cadáver fue localizada un arma corta, tipo pistola o revólver, cuya procedencia está siendo investigada por la Guardia Civil, según han confirmado a EFE.
Las mismas fuentes han señalado que se han abierto varias líneas de investigación y que, de forma inicial, no se aprecia la intervención de terceras personas, si bien las diligencias continúan abiertas para esclarecer plenamente lo sucedido.
El hallazgo del cadáver se produjo el mismo día en que familiares, amigos y el grupo de moteros al que pertenecía el fallecido habían convocado una concentración en la Plaza de la Constitución de Venta de Baños para reclamar que se mantuviera la investigación sobre su desaparición. En redes sociales, tanto la familia como compañeros del colectivo motero han pedido que se investigue la muerte y han manifestado públicamente que descartan la hipótesis de un suicidio.
Desde que se denunció la desaparición, la Guardia Civil coordinó amplios dispositivos de búsqueda en los que participaron patrullas de seguridad ciudadana, la USECIC, motoristas del SEPRONA, drones del Equipo PEGASO, helicópteros del Servicio Aéreo, perros del Servicio Cinológico especializados en la localización de personas y equipos del GEAS para las búsquedas en ríos, además de vecinos, amigos del desaparecido y la Policía Local de Venta de Baños.
