El desenlace aún está en el aire, pero el ruido ya es ensordecedor en redes sociales. La final de Maestros de la Costura Celebrity se emite este miércoles 16 de abril, aunque en las principales plataformas ya se ha vivido como si hubiera terminado. No hay veredicto oficial, no hay ganadora, pero sí una favorita indiscutible para buena parte del público: Carmen Farala.
Las especulaciones, los reproches y los memes han llenado el timeline de X mientras RTVE apuraba su enésimo intento por mantener vivo el formato en La 1 con la fórmula de siempre: meter famosos y cruzar los dedos.
Posible tongo
El jurado, en el punto de mira antes de decidir
Las críticas no han sido precisamente comedidas. A la espera de que finalice la gala final, muchos daban por hecho que el jurado apostaría por Pilar Rubio, no tanto por la calidad de sus diseños, sino por una supuesta inclinación de los jueces que ha ido dejando pistas. “Buscándole el mínimo detalle a Carmen para regalarle la chaquetilla a Pilar”, señalaba un usuario, convencido de que la balanza ya estaba trucada antes de comenzar la prueba definitiva.
También se cuestionaba la forma de evaluar a las finalistas. Otro usuario, claramente molesto, escribía: “La puta vergüenza de jueces que al de Pilar Rubio que en muchas cosas no se parece al original todo eran halagos. Y al de Carmen todo el rato poniéndole pegas a todo”. “800 fallos que le han buscado a un abrigo perfecto con bolsillos funcionales... pues ok, dadle la bata a la Pilar y sus tres ponchos...”, apuntaba otro.
La Terremoto de Alcorcón y Edu Soto completaban el cartel de aspirantes al Maniquí de Cristal, aunque su presencia en la final ha quedado bastante eclipsada. El protagonismo, al menos fuera del taller, ha sido cosa de dos.
En mensajes publicados durante la gran final alguien resumía el ambiente del último episodio con una frase que ha sido muy compartida: “En fin, lista para vislumbrar el éxito de Carmen Farala, o el mayor robo de la historia”.
La mecánica de la final no se aleja de lo habitual: tres pruebas con diferentes niveles de exigencia y un objetivo claro, ganar los 50.000 euros para donarlos a una causa solidaria. El formato se ha beneficiado de la visibilidad que da el elenco VIP, aunque ha vuelto a tropezar con una estrategia de programación que no ha ayudado a consolidar el seguimiento del público, sobre todo por haber empezado muy tarde.
Por mucho que el veredicto esté por conocerse, ya hay quien ha dictado el suyo desde casa. El resultado aún no se ha visto en pantalla, pero el juicio popular lleva días cosido.